El extremo de Peñarol Jaime Báez se refirió en conferencia de prensa a la goleada aurinegra 4-0 ante Rampla Juniors este sábado por la noche en el estadio Campeón del Siglo por la tercera fecha del torneo Clausura.

El atacante, que llegó en julio al conjunto carbonero se refirió a la preparación para enfrentar al Picapiedra, teniendo en cuenta lo que se venía después: “En la cabeza está ese partido [ante Flamengo]; sabemos lo importante que es para nosotros, para la gente y para Peñarol. Igualmente, preparamos este partido pensando en Rampla; siempre trabajamos partido a partido. Pasamos la prueba y, ahora sí, hay que pensar de lleno en lo que viene”.

El delantero analizó el primer tiempo en el que al Mirasol le costó abrir el marcador ante una defensa muy cerrada: “Jugamos apurados y nos enredamos un poco con la pelota; personalmente, me sentí así. Tratamos de buscar jugadas que capaz no salían. Había que tener más la pelota y buscar soluciones. El juego te lleva a tratar de arriesgar. Tenemos que ser conscientes en esperar el momento justo”.

Con relación al partido del próximo jueves ante Flamengo, expresó: “La motivación es enorme, por todo lo que conlleva un partido de ese tipo. No hay motivación más grande que jugar un partido así”.

“Todavía no me siento al 100 por ciento. Hay muchas cosas que me gustaría pulir y mejorar, más que nada con la pelota y en el ritmo de juego. Creo que puedo dar mucho más, pero no quiero desesperarme ni ponerme loco con eso, porque todo lleva su tiempo y se va a dar en el momento justo. Ojalá estar al máximo el jueves”, contó.

Báez también se refirió a su compañero Maximiliano Silvera: “Es un gran jugador y es completo. Su estilo de juego es limpiar todas las jugadas. Capaz a él no le llegan tan limpias, pero él las limpia y te hace jugar bien. Casi siempre encontrás cosas buenas moviéndote cerca de él”.

Y, consultado por las diferencias que encontró entre el fútbol europeo y el uruguayo en su retorno, dijo: “Más que nada lo que cambia un poco es el ritmo de juego, pero acá siempre hay muy buenos jugadores que no te regalan una jugada y meten todo; esa es la base del fútbol uruguayo, y es lo que hace que en el mundo el fútbol uruguayo sea conocido y respetado. Hay muy buena base y elementos en todo el fútbol uruguayo”.