Un cabezazo del portugués Cristiano Ronaldo a falta de siete minutos para el final frustró a un Torino valiente en el derbi de Turín (1-1), en el partido que abrió la trigésima quinta jornada.
Torino se adelantó gracias al serbio Sasa Lukic y saboreó el triunfo hasta los últimos minutos, cuando apareció Cristiano para rescatar al Juventus, ya campeón de Italia.
Habría sido un triunfo fundamental para el Torino, que de ganar este derbi podía alcanzar la cuarta posición y que, con este punto, se confirmó sexto en la clasificación.
El equipo "granata" jugó un partido de gran compromiso e intensidad y aprovechó un grave error del bosnio Miralem Pjanic, que falló un fácil control en su mitad de campo defensiva, para recuperar el balón con Lukic y adelantarse en el marcador.
La ventaja aumentó aún más la confianza de un equipo que llegaba a este derbi tras arrollar al Milan e invicto desde hace cinco jornadas, con tres victorias y dos empates.
Y la organización táctica de Mazzarri complicó el trabajo del Juventus, que reaccionó y encerró al rival en su mitad de campo, aunque sin poder crear ocasiones claras en el área rival.
Cristiano, con un derechazo desde fuera del área en el 24, fue el que más se acercó a la igualdad, pero el balón rozó el poste y los dos equipos se fueron al descanso con el Torino por delante en el luminoso.
Con un CR7 que firmó siete de sus últimos diez goles de cabeza y que alcanzó los 21 goles en esta campaña, el Juventus, ya matemáticamente campeón de Italia, evitó la derrota y complicó el sueño "Champions" de sus rivales de la ciudad.