En 1981, cuando murió un joven hincha del Inter por enfrentamientos con
seguidores del Milan, las aficiones de ambos clubes acordaron un pacto de no
beligerancia que se mantiene hasta hoy día, por lo que, en caso de que el Inter
se proclame campeón, no se esperan choques fuertes.
Más allá del fútbol, del histórico derbi de Milán que puede
acabar con el Inter campeón del Scudetto, existe la preocupación de los
posibles altercados en las celebraciones multitudinarias del estilo. En Milán,
en cambio, hace mucho que no hay peleas graves entre dos hinchadas muy
convulsas. Todo queda en el campo.
Los jefes de las facciones ultras de aquella época, los años
80, los líderes de los Banditi Curva Sud Milano (Milan) y Curva Sud 69 (Inter),
sellaron un acuerdo de paz con un apretón de manos que se mantiene vigente.
Fue la muerte del joven Vittore Palmieri, de 21 años, tras un
derbi della Madonnina en 1981, la que llevó a ambas aficiones a poner fin al
enfrentamiento violento. Solo hay rivalidad dentro del campo, con tifos,
pancartas y cánticos. Algunas canciones, incluso, fueron eliminadas para
evitar conflicto.
De hecho, fue un coro de Federico Dimarco, carrilero del
Inter, nada más terminar el derbi de Liga de Campeones en mayo de 2023, el que
provocó el único enfrentamiento entre ambas aficiones en los últimos años,
solventado mediante comunicados en redes sociales y sin violencia, aunque con
una amenaza pública al futbolista por parte de los milanistas.
“Entendemos y compartimos el deseo de alegría y celebración,
nadie ha pensado nunca en prohibir las celebraciones y las burlas, pero en una
ciudad como Milán hay límites que nunca deben cruzarse por ambas partes. La
afición de Milán se ha comprometido desde hace 40 años años para llevar
adelante un pacto de no beligerancia, un caso único en Italia que nos permite
vivir nuestra ciudad con respeto, tranquilidad y lealtad”, dijo la facción
radical milanista en redes sociales.
En cuanto Dimarco supo que existía un pacto entre ambas
aficiones pidió perdón y la Curva Sud 69 respondió en nombre de su jugador.
“No es culpa de Dimarco, no podía saber que habíamos llegado
a un acuerdo con los dirigentes de la afición rossonera. Ya no se cantaba ese
estribillo. Y del mismo modo los milanistas renunciaron a otros cánticos contra
nosotros. La reacción de los milanistas fue ciertamente exagerada, pero todo
volvió a la normalidad”, declaró Marco Ferdico en una entrevista con el Corriere
della Sera en marzo.
Pese al acuerdo entre ambas aficiones, Milán estará preparada
para actuar en caso de un enfrentamiento. Habrá un operativo especial en los
aledaños del estadio de San Siro durante toda la tarde y en la zona del Duomo,
donde celebraría el título la afición del Inter en caso de ganar.
EFE / FútbolUy
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