Con los goles del danés Christian Eriksen y de Marcus Rashford, y con Facundo Pellistri como suplente y sin ingresar, el Manchester United solventó el compromiso ante el Burnley, líder de Championship, Segunda División inglesa, para alcanzar los cuartos de final de la Copa de la Liga.
El reencuentro con la competición del conjunto del neerlandés Erik ten Hag mostró un equipo solvente que sobrevivió a los apuros al que le sometió su rival, que tuvo sus opciones, especialmente a partir del ecuador de la primera parte.
Rashford fue una amenaza permanente para el conjunto de Vincent Kompany, que descendió de la Premier en la temporada pasada. Solo le faltó acierto en los primeros minutos al atacante del United que pudo desequilibrar el marcador antes de que Eriksen marcara.
El danés culminó una estupenda jugada justo antes de la media hora, cuando un centro lejano de Bruno Fernandes fue recogido por Aaron Wan Bissaka en la derecha. No dejó caer la pelota y de primeras lo envió al área pequeña donde Eriksen llegó y remató a la red.
Pudo haber más goles. Ashley Barnes tuvo una muy clara tras un error de Casemiro pero tiró fuera. También el brasileño Antony que evitó Peacock Farrell. El marcador no se movió y el Manchester United amarró el triunfo y su objetivo.