Manchester United volvió a vencer al Liverpool y le cortó una racha invicta de 13 encuentros. Justamente en el clásico anterior, cuando los dirigidos por Van Gaal golearon 3-0 en Old Trafford, se registró la última derrota del elenco de Brendan Rodgers, que además llegaba a esta 30ª etapa de la Premier League con cinco triunfos al hilo y acechando por el cuarto puesto.

Los diablos rojos sumaron su cuarta victoria consecutiva con su 2-1 en Anfield Road y no sólo se consolidaron en el cuarto puesto (que clasifica a la próxima Champions League) de la tabla con cinco puntos de ventaja sobre su rival de turno, sino que además siguen a tiro del Arsenal, del que los separa un punto, y del Manchester City, que está uno más arriba que los gunners.

El primer gol del clásico inglés fue obra del español Juan Mata, quien a los 14’ recibió un pase profundo de su compatriota Ander Herrera explotando la espalda del lateral zurdo Alberto Moreno y definió a la carrera tras quedar cara a cara con el arquero Mignolet. Luego generó muy poco más el conjunto visitante en el primer tiempo, pero le alcanzó para irse en ventaja al descanso.

El Liverpool apenas inquietó con un remate de Lallana en posición inmejorable que se fue apenas desviado, luego de recibir un centro de la muerde de Sterling. Consciente del flojo rendimiento de su equipo, Rodgers mandó a la cancha a Gerrard para el complemento, pero a 50 segundos de su ingreso le dio un pisotón innecesario a Ander Herrera cuando el español estaba en el piso y fue bien expulsado.

Manchester United aprovechó la superioridad numérica para aumentar la diferencia a los 59’ con uno de los mejores goles del fin de semana. Mata tiró la pared con Di María y picó al área a buscar la devolución, que llegó perfecta por parte del argentino para la tijera de zurda del héroe de la jornada. El volante surgido en la cantera del Real Madrid, donde no tuvo posibilidades de debutar en el primer equipo, parecía liquidar el pleito.

Pero el local intentó reaccionar y le puso dramatismo al tramo final del encuentro, asumiendo riesgos de equipo grande y atacando con más orgullo que juego. Coutinho tomó la lanza del Liverpool y de una notable habilitación suya llegó el tanto del descuento, marcado por Sturridge con un buen derechazo al primer palo. Luego apretó los dientes y empujó el local, que mandó a Balotelli a la cancha en lugar de un lateral pero no pudo empatar.

Sobre el final tuvo la posibilidad de aumentar la diferencia Manchester United tras un penal de Emre Can sobre Blind, pero el remate de Rooney fue contenido por Mignolet cuando el reloj marcaba 93 minutos.

POSICIONES, FIXTURE Y GOLEADORES

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