Por la fecha 31 de la Premier League, el Crystal Palace derrotó al Arsenal 3-0 y lo sacó de los puestos de UEFA Champions League, que ahora ocupa el Tottenham de Rodrigo Bentancur.
El Arsenal, salvo una derrota frente al Liverpool, acumulaba victoria tras victoria desde el mes de febrero. Sus números eran espléndidos: seis victorias en siete partidos. Con ellos, Mikel Arteta fue nombrado mejor entrenador del mes de marzo. Ya lo fue en septiembre y, desde el curso 2007/08, con Arsene Wenger, ningún técnico gunner había conseguido esa distinción dos veces en un mismo curso.
Todo el trabajo del Arsenal de las últimas semanas se fue por la borda en los primeros 45 minutos. Firmó una primera parte para el olvido, en la que no le salió absolutamente nada y que aprovechó el Crystal Palace para dejar el encuentro muy encarrilado.
El ghanés Thomas Partey no pudo conectarse con Martin Odegaard y Saka Bukayo fue incapaz de desbordar por la banda derecha. Tres de las mejores armas del Arsenal fueron incapacitadas y, sin ellas, fue incapaz de abrir al Crystal Palace, que después de hacer su segundo tanto, simplemente se dedicó a esperar para sentenciar a su rival.
El primero en abrir el marcador fue Jean-Phillipe Mateta, que no desaprovechó un tiro libre ejecutado por Gallagher desde la banda izquierda y que prolongó Joachim Andersen para dejar la pelota perfecta para que el delantero francés, de cabeza, inaugurara el marcador.
Poco después, casi a la media hora, de nuevo Andersen fabricó medio gol. El central del Crystal Palace, con un pase espectacular desde el centro del campo, habilitó al otro ghanés del partido, Jordan Ayew, que no falló en un mano a mano frente a Aaron Ramsdale.
Con un 2-0 en contra, el Arsenal reaccionó en su regreso al césped, pero Vicente Guaita se encargó de frenar cualquier atisbo de remontada. Sobre todo en un remate de Emile Smith Rowe desde dentro del área chica, que no acertó a batir al portero español.
El acierto de Guaita frenó definitivamente al Arsenal, que recibió el último golpe sobre el cierre, cuando Odegaard cometió un penal y lo marcó Wilfried Zaha. Luego, aunque el Arsenal intentó maquillar el resultado, Guaita volvió a hacerse gigante para confirmar una victoria que colocó al Arsenal en la quinta plaza empatado a puntos con el Tottenham.