El litigio entre Gastón Silva e Independiente sigue su curso y promete tener algunos capítulos más, luego de que el futbolista uruguayo intimara al club y posteriormente se declarara libre por falta de pago. Si bien la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) le dio la libertad de acción, la que laudará en el asunto será la FIFA, que a juzgar por los entendidos fallará a favor del ex Defensor Sporting.

“Durante más de un año y medio de trabajo no he cobrado en debida forma mi remuneración laboral. Y a pesar de que el club fue conocedor de mi reclamo -digamos que fue un hecho de público y notorio conocimiento-, mantuvo su postura incumplidora”, comentó el salteño en un comunicado difundido en sus redes sociales bajo el título “de la negación de la realidad a la extorsión”.

Luego de que Silva demandara a Independiente por U$S 2.200.000 por falta de pago y agregando una indemnización entendiendo que fue despedido en medio de una pandemia, Independiente movió sus fichas entendiendo que el jugador incumplió el contrato. “El club me inicia una contrademanda por U$S 8.000.000. Era previsible (incluso, anunciado). Pretende generar temor en los clubes que puedan estar interesados en contratarme. El terrorismo de mercado. Quizá lo logren, no lo sé”, escribió.

“Mi caso es muy sólido, no hay duda de eso. Digamos que no hay que ser abogado para darse cuenta que si un club fue intimado al pago de una suma equivalente a casi ocho (8) meses de sueldo y no te pagó, poco derecho tiene a reclamar. Sentido común”, añadió Silva, quien recuerda que intentó buscar soluciones para su situación y reveló que su propuesta estuvo “antes y aún después” de que la AFA le diera la libertad de acción. No obstante, se topó con una dirigencia que asume el tema como “personal” y a la que no le importa el perjuicio económico que podría generarse a la institución porque “al juicio lo va a pagar el próximo”.

“El club utiliza esta demanda para forzarme a arreglar bajo condiciones abusivas. No tengo nada contra el club, repito. Pero esta tampoco es la forma en la cual lo lograrán. Y si eso me impide continuar mi carrera hasta que la FIFA me dé la razón, entonces esperaré. No me parece justo regalar mi trabajo ni el dinero de mi familia, en el marco de una extorsión”, señaló Silva, quien ahora espera por el dictamen de FIFA y, en el peor de los casos, podría ver su caso llevado al TAS si Independiente apela.

“Los abultados números de mi deuda exhiben que no es el atraso de uno o dos meses. Es de bastante más y se inició mucho antes de la pandemia”, escribió, y agregó en referencia a los directivos del Rojo: “Si tenés problemas con casi todos, quizá tengas que rever tu manera de conducir. Y la pandemia afectó a todos los clubes, pero noticia es uno solo”.

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