El presidente de Peñarol, Ignacio Ruglio, aseguró que la semana que viene se tomará la resolución final si el duelo definitorio ante Rosario Central del martes 28 en el Campeón del Siglo será con la presencia de hinchas visitantes, tras el “clima de guerra” de la ida.
Ruglio, entrevistado en el programa “De fútbol se habla así” de DGO contó que la decisión final aún no está adoptada: “Haremos alguna consulta en estos días y la semana que viene, entre lunes y martes tomaremos la resolución final”.
Consultado sobre las pautas en las que se basaran para hacerlo, contó. “De lo que surja de esas consultas y lo que estamos conversando con los compañeros de directiva. El clima de guerra con que nos esperaron allá y todo lo que generaron llevó a esto”.
“No podemos dejar que acá las cosas se salgan de control porque necesitamos cuidar a la gente y nuestro estadio”, dijo, para recordar: “El clima que crearon ellos allá, las vallas que le tiraron a los hinchas de Peñarol, es un clima que generaron ellos”.
“Necesitamos cuidar la integridad de la gente y hay momentos donde tenemos que tomar decisiones que pueden ser las no deseadas. El clima se enrareció desde allá y somos rehenes de eso”, aseguró.
El presidente mirasol aseguró que además se está tratando el tema con las máximas autoridades: “Desde el Ministerio del Interior nos dijeron que estaban muy preocupados por este partido. Un oficial de la Unidad de Violencia en el Deporte viajó a Rosario y vio todo lo que pasó. En su informe expresó que se dio un clima muy hostil y había que tener mucho cuidado en lo que pase acá. Nos estamos respaldando en ellos”.
En referencia a lo deportivo fue claro al señalar: “Queremos pasar, es fundamental para el club entrar en octavos de Libertadores, es un paso que tenemos que dar y se nos viene postergando hace mucho tiempo”. Y cerró: “Espero que ante Rosario estén a la orden todos los jugadores que al día de hoy están lesionados o en sanidad”.
Cabe destacar que los aurinegros llevaron más de dos mil hinchas al duelo en Rosario de la primera fecha y en el cual se registraron graves incidentes. Una valla metálica cayó sobre la parcialidad carbonera lanzada por sus pares canallas y una piedra impactó y cortó el rostro de Maximiliano Olivera tras el pitazo final.