El presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Ignacio Alonso, fue elegido este viernes como representante de la Conmebol ante el Consejo de la FIFA, en una votación virtual en la que fue reelegida en ese cargo la ecuatoriana María Sol Muñoz.
Ambos fueron designados en esos cargos en el marco de la reanudación del 72º Congreso Ordinario de la Conmebol, de acuerdo con los puntos del orden del día del 2 de abril también por videoconferencia, debido a la pandemia de COVID-19, informó el organismo en un comunicado.
Alonso reemplaza al argentino Claudio Tapia, que interinaba el cargo luego de que el organismo revocara, en octubre de 2018, el mandato de Wilmar Valdez, tras la renuncia de éste al frente de la AUF en medio de un escándalo de denuncias de corrupción.
La votación se realizó por esa vía tras la reciente aprobación de esta metodología por el tribunal electoral de la Conmebol dada las medidas de prevención sanitaria aún vigentes en la mayoría de los países sudamericanos.
El proceso fue fiscalizado por un veedor de la Justicia Electoral de Paraguay, donde está asentada la sede del organismo, y Felipe Cantuarias en representación de la FIFA, y con ello se dio por cerrado el Congreso de abril pasado.
En ese entonces, las asociaciones nacionales aprobaron de forma unánime la constitución por primera vez de las reservas estatutarias por un monto de 27 millones de dólares.
En cuanto al plan de inversiones, la asamblea aprobó un monto de 1,8 millones de dólares para un centro de capacitaciones y tecnología en su sede en Luque (Gran Asunción).
El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, destacó la solidez financiera del organismo para hacer frente al impacto de la COVID-19, algo que se ha traducido en adelantos y ayudas económicas a las asociaciones nacionales.
"Esta crisis hoy nos encuentra en una posición sólida, en el 2019 la Conmebol siguió avanzando y alcanzó grandes logros, siendo la confederación de mayor crecimiento en el mundo", afirmó Domínguez en conexión de las autoridades sudamericanas y autoridades invitadas, entre ellas el titular de la FIFA, Gianni Infantino.
El organismo desembolsó 65 millones de dólares para los clubes que disputan las copas Libertadores y Sudamericana, suspendidas de forma temporal por el coronavirus, como anticipo de hasta un 60 por ciento de sus derechos de participación. Posteriormente destinó 14 millones adicionales correspondientes a los Fondos Evolución.