Ignacio Alonso, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, hizo un balance del año, se refirió a la obtención del Mundial sub-20, habló sobre la llegada de Marcelo Bielsa y cerró acerca de la salida de Marcelo Broli, entre otros temas.
El directivo comenzó contando, en el programa Punto Penal de Canal 10, cómo es su agenda día a día y la dedicación que le da a Uruguay: “Estoy trabajando desde las 7 hasta las 2 de la mañana. Trato de estar la mitad del tiempo adentro de la AUF y la otra mitad afuera. Me gusta hacer muchas reuniones afuera para poder visitar y no estar encerrado dependiendo psicológicamente de un lugar”.
Alonso comenzó con su reflexión anual: “Fue un año electrizante. Primero, el duelo por la vuelta del Mundial sin lo que uno quería, sin nada prácticamente, más allá de estar orgullosos de llegar por cuarta vez consecutiva después de un momento muy complicado en el que parecía que Uruguay quedaba afuera. El ciclo 2021 y comienzo de 2022 fue tremendo. En el Mundial, no pudimos pasar la fase, ese era un objetivo primario que teníamos y nos tenía a todos muy entusiasmado”.
Y agregó: “Luego del duelo del mundial, viene el ciclo electoral, que fue muy intenso por distintas circunstancias, personalmente hablando. Pudimos salir victoriosos con una mayoría incluso superior a la que nos consagró por primera vez presidente. Vino el armado del ejecutivo, la designación del cuerpo técnico de la selección mayor, el inicio de los campeonatos e inmediatamente la presentación del cuerpo técnico de la selección mayor, que tuvo, desde su elección hasta la firma del contrato, todo un proceso”.
Por otro lado, en cuanto a la obtención del campeonato del mundo, reconoció: “El Mundial sub-20 fue el gran logro del fútbol uruguayo en las últimas décadas. Volver al plano internacional con un título mundial, y un plantel y cuerpo técnico que marcaron ejemplo, fue una movilización tremenda”.
“Después, continuamos con los campeonatos locales, la preparación de la selección, la presentación del cuerpo técnico en los partidos de fecha FIFA del mes de junio, vinieron los acudimientos referidos al paro y esa final de negociación con la Mutual y los clubes, con un texto que estaba muy encaminado, pero se trancó sobre el final. Apareció ese paro de cuarenta días al que hubo que encontrarle una solución. Terminó trastocando completamente la organizativa de los torneos de la A, la B y Copa Uruguay. A pesar de ello, pudimos manejar las restantes competiciones, pero esos torneos terminaron desacomodando y hubo que apelar a la intensidad de trabajo y la habilidad de las mesas para poder rediagramarlos. Tuvimos que reprogramar la Copa Uruguay para los primeros meses del 2024”, continuó.
Con respecto a la situación de la Segunda División Profesional, mencionó: “Ahora tenemos este pequeño problema con la divisional B, con un reclamo que nos va a llevar a estirar la definición del último ascenso”.
Y concluyó su resumen anual: “Ha sido un año con mucha cuestión, y, lógicamente, marcado por el último semestre de la selección nacional, En el que uno vio con satisfacción una cantidad de avances muy positivos”.
Consultado por la Eliminación del Mundial, expresó: “Fue una situación muy dolorosa. Desde el punto de vista deportivo hubo golpes, como haber quedado eliminados de la Copa América por penales, pero la salida del Mundial fue muy dolorosa y nos generó un duelo. Íbamos todos con mucho entusiasmo porque sabíamos que teníamos una confluencia de dos generaciones que cada una, en lo suyo, quería tener un gran Mundial. La joven y la histórica, que quería despedirse de los Mundiales con una gran actuación. Sentía vergüenza cuando veía las banderas colgadas en Uruguay, porque uno se sentía parte de algo que no había dado el fruto que uno quería”.
Con relación a Diego Alonso y la difícil decisión de cesar al Maestro Óscar Washington Tabárez, explicó: “Siempre defendimos la actuación de (Diego) Alonso, porque vino en un momento muy complicado, cuando veíamos muy comprometida la posibilidad de clasificar al Mundial 2022, que realmente hubiese sido duro. Entendíamos que había más probabilidades cambiando el cuerpo técnico que manteniéndolo. Fue un tema muy duro. Nos causó mucho dolor la decisión sobre el Maestro Tabárez, pero entendíamos que, en ese momento, la probabilidad de clasificación aumentaba si hacíamos los cambios en la conducción deportiva”.
Continuó elogiando al Tornado: “Demostró mucho conocimiento, metodología y cercanía con los jugadores como para generar un cambio anímico y volcar la balanza en los últimos cuatro partidos para clasificar al Mundial por cuarta vez consecutiva. Alcanzamos el récord histórico de la generación entre el 62 y el 74. Preparamos el Mundial a mucha conciencia, tanto el cuerpo técnico como la AUF, pero no se dio y dolió mucho”.
Y también dio su punto de vista sobre la salida del Tornado Diego Alonso de la selección: “Creemos en el trabajo de él y creo que es un gran entrenador. Tuvimos dos conversaciones en el Mundial. Le dijimos que confiábamos en él como para un nuevo ciclo. Puede ser que me haya faltado una conversación con él. Era necesario que todos conversáramos con la gente. (Diego) Alonso tenía muy buena consideración de parte nuestra. Entendimos que faltó una palabra para el público en aquel tiempo”.
“La reprogramación de Eliminatorias nos permitió pensar un poco más, tomar alguna alternativa y ordenar la casa. Se pensó en el nombre de (Marcelo) Bielsa, que siempre generó atractivo en nuestro entorno. Lo que pedimos con el director deportivo fue el contacto con él y luego tuvimos una conversación por zoom. Después, participamos de una reunión presencial en Porto Alegre”, dijo sobre la llegada de Marcelo Bielsa.
Y cerró hablando acerca de la situación con Marcelo Broli y su salida de la sub-20: “Entiendo que fue por lo económico. La diferencia económica existía. No era una diferencia económica sustantiva en ese momento, sí, de acuerdo con lo que Marcelo (Broli) nos planteó, era simbólica en el sentido de que él pretendía que se llegara a determinado número por el campeonato del mundo que había logrado. Nosotros habíamos hecho un gran esfuerzo de carácter presupuestal al hacerle esa propuesta. Cada uno a su manera tenía razón, el tema fue que las dos razones tenían una diferencia. Nos sorprendió la carta, pero nunca cerramos la puerta. Hablé con él un par de veces luego. Es un gran tipo y entrenador. Hay que desdramatizar el tema”.