La selección uruguaya de handball masculino debutará este miércoles en el Campeonato Sur Centro Americano que se está realizando en Recife, Brasil, cuando choque con Bolivia desde las 16 horas, un partido de que ganar le asegurará un cupo en el Mundial de Suecia y Polonia 2023.
Uruguay integra el grupo “A” con los del altiplano y Bolivia, mientras que en el “B” están sembrados Brasil, Chile, Costa Rica y Paraguay, clasificando los dos primeros de cada serie a semifinales.
Al haber cuatro lugares clasificatorios para la cita mundialista, con el solo hecho de ganar el partido inaugural los nuestros inscribirán su nombre en la máxima competencia de este deporte.
“El primer objetivo indiscutible es ganarle a Bolivia”, comentó desde tierras brasileñas Felipe González, arquero de los celestes: “eso nos permitirá clasificar al Mundial que es lo que vinimos a buscar. Sabemos que es un partido bastante accesible, más si tenemos en cuenta lo sucedido en el anterior torneo”.
Uruguay se enfrentó con los “verdes” en la pasada edición de enero de 2020 y se quedaron con una cómoda victoria por 55-1.
“Vamos a utilizar los dos partidos del grupo para que nos permita prepararnos para pelear por meternos en el medallero. Queremos llevarnos una presea y plantear en cancha la mentalidad y forma de juego que estamos trabajando con el nuevo cuerpo técnico”, en referencia a la llegada de Nicolás Guerra y sus asistentes al mando de la celeste, en reemplazo de Jorge Botejara.
“Aprovecharemos para adaptar sistemas, corregir errores y llegar lo más aceitados posibles al momento de la definición”, finalizó diciendo “Pipe”.
Los celestes, que tienen todo su plantel a la orden para este cotejo, volverán a jugar el jueves 27 ante la difícil Argentina a las 18.
Nuestro representativo llega a esta cita tras participar a principios del 2021 en el Mundial de Egipto (finalizó en el puesto 24º) en su primera experiencia en el máximo evento de ese deporte.