Martina Barreiro llegó a Italia en noviembre de 2019 para enrolarse al AC Life Style Handball Erice en Sicilia, un equipo de handball de la ciudad de Trapani que vio sus grandes condiciones jugando por Goes, su club de origen, y la selección uruguaya, por lo que decidió contratarla.

La uruguaya rápidamente se adaptó a su nuevo equipo y destacó como figura en un torneo que actualmente está parado por la pandemia del Coronavirus (Covid-19), algo inesperado antes de su llegada al país europeo, pero a lo que también le toca hacer frente.

Italia es uno de los países más afectados por esta situación, pero Barreiro contó que principalmente "se da en el norte, en la región de Lombardía". "Nosotros en el sur tomamos conciencia del verdadero alcance en los últimos días", confesó.

"El pasado domingo fallecieron 133 personas en un día y ahí como que terminé de caer en la situación", narró. Ese hecho además llevó a la Federación Italiana de Handball a suspender toda la actividad hasta el mes de abril. "En un principio se hablaba de jugar a puertas cerradas, pero por la gravedad de lo que estaba pasando se decidió parar todo", agregó.

Medidas

"En el Sur no hay tal caos como en el norte", volvió a explicar Barreiro, pero aclaró que sí se tomaron medidas importantes para evitar que la pandemia cobrara fuerza en esa zona.

La uruguaya vive en un apartamento con una compañera croata y para ambas "la diaria cambió" y se tuvieron que adaptar.

"A las 18 horas está todo cerrado en la ciudad, no hay comercios, restoranes, nada", explicó, y agregó: "antes de esa hora para poder salir hay que tramitar un permiso especial".

"La nueva disposición afecta a toda Italia sin distinción de zona roja, naranja o amarilla", dijo la deportista uruguaya, y agregó que "el decreto es del 8 de marzo y requiere que todos los ciudadanos eviten moverse de un área a otra, o viajar, pero también evitar movimientos dentro del mismo territorio (ciudad) si no es por razones obvias".

"No está prohibido salir de las casas, pero debe hacerse por trabajo, salud o necesidades de subsistencia (compras, por ejemplo), para lo cual hay que gestionar un permiso diario asumiendo la responsabilidad de estar conscientes del posible contagio", amplió.

"En los supermercados, por ejemplo, se trata de que ingresen de a 10 personas por vez para evitar aglomeraciones", narró más tarde.

"Por esta semana no vamos a entrenar y hay que ver si en el corto plazo volveremos a hacerlo pero a puertas cerradas, aunque todo dependerá de la evolución de la pandemia. Siempre se recalca la idea de que son medidas de precaución, no para asustar, pero sí para controlar el contagio", añadió.

"En realidad yo estoy super tranquila pero respeto las medidas que se tomaron y las cumplo. Por eso no he salido de casa desde el lunes", concluyó.