Álvaro Gutiérrez, entrenador de Nacional, dijo haber pasado “de cero a 100” a partir del pasado 20 de marzo, cuando retornó al club con la misión de mejorar la floja campaña que estaba realizando el argentino Ricardo Zielinski. En diálogo con 100% deporte de Sport 890, reflexionó sobre su arranque.

“Llegamos y enseguida empezó la Copa Libertadores con el apremio de conseguir resultados y funcionamiento a la vez. Por ahora los resultados nos han acompañado un poco, pero estamos en debe en la parte ofensiva del funcionamiento del equipo”, reconoció.

“Empezamos sobre la base de mantener el cero en el arco, que el otro día contra Wanderers fue fundamental. Tuvimos pocas chances de gol, pero concretamos una y nos llevamos los tres puntos”, sostuvo, más allá de reconocer que, a nivel defensivo, el equipo falló en el primer tiempo.

“Defensivamente se jugó bien”

“No defendimos bien y lo corregimos en el segundo tiempo. Mantuve una base de nueve jugadores y el equipo estaba agotado del trajín. Se notó. Estuvimos descoordinados en la presión y nos crearon muchas situaciones, aunque peligrosas fueron dos”, comentó.

“Se dice que se jugó mal, pero no se puede generalizar. Defensivamente se jugó bien. Se están tomando pocos goles y nos crean pocas ocasiones de gol”, añadió sobre el último partido y los anteriores, y los números le dan la razón. Tras la derrota clásica, no recibió goles a nivel local con Danubio, Fénix ni Wanderers.

“Tal vez a veces entregamos la posesión de la pelota y eso hace pensar que estamos siendo dominados, pero nos gusta salir rápidamente al contragolpe porque creemos que, si estamos precisos, podemos abrir los partidos y manejarlos con tranquilidad”, argumentó.

Lo más difícil: el ataque

No obstante, reconoce que “lo más difícil” es generar circuitos de ataque. “Es más más fácil lograr una automatización defensiva que una automatización ofensiva cuando tenés poco tiempo para trabajar. Necesitás mucha repetición y tiempo de fútbol, analizando y corrigiendo, y nosotros no lo tenemos. A veces jugamos cada tres días”, señaló.

“Esta semana que jugamos cada cinco días, hoy los que jugaron el lunes no hacen nada intenso, y mañana tampoco porque se aproxima el próximo partido. Así nos está pasando hace un mes y medio. Todo ese tiempo lo tenés que llevar a boquilla y mostrando videos, pero la práctica no la tenés”, lamentó.

Respecto a Gastón Pereiro, uno de los principales referentes ofensivos, dijo que “es tremendo jugador” y que “le está faltando un poquito de precisión”. “A la hora de hacer el esfuerzo y lo que le pedimos, lo está tratando de hacer. Está motivado y con ganas. Como todos, tiene que haber una sinergia entre los rendimientos individuales y colectivos. Si el colectivo aumenta, aumenten las individualidades. Y viceversa”, añadió.

Gonzalo Castro, las altas y el “culo” de Abel Hernández

Consultado por Gonzalo Castro, cuya contratación pidió para el próximo mercado de pases, fue claro: “Me gusta porque lo conozco y creo que puede sumar mucho, dentro y fuera de la cancha. Y puede potenciar a otros, como en su momento nos potenciaba Hugo de León a los que estábamos al lado”.

“Al Chori siempre le digo que tiene que cobrar la mitad del pase de Matías Viña porque lo potenció muchísimo. Es un jugador con experiencia al que no le quema le pelota y tiene pierna zurda natural. Es el único jugador en el que estamos todos de acuerdo, pero tratamos de manejarlo con respeto porque tiene contrato con River. Por los comentarios que he hecho y los que he recibido, hay buena onda”, añadió.

Por último, cuando se le preguntó por la chilena de Abel Hernández que selló la victoria de Peñarol por 2-1 sobre Plaza Colonia, opinó que “fue un golazo”. “Primero dije: ‘¡qué culo!’. Pero fue un golazo. El gesto técnico fue increíble. Digo ‘qué culo’ porque le pegó con la canilla, pero fue impresionante”, concluyó.