Medios brasileños dieron cuenta de la situación actual de Luis Suárez, que rápidamente repercutió en Uruguay. El futbolista informó a su club, el Gremio de Porto Alegre, que evalúa la posibilidad de retirarse del fútbol por los fuertes y cada vez más persistentes dolores en la rodilla derecha, la misma por la que ya fue dos veces operado.

Un día después, Globo esporte anunció que habrá una reunión con el jugador y sus representantes legales para discutir los posibles escenarios a futuro, y que, “tras bambalinas, el club admite sorpresa” por el aviso del goleador salteño, a quien intentarán retener al menos hasta diciembre para que cumpla uno de los dos años que firmó de contrato.

Habrá una conversación con el presidente Alberto Guerra y el departamento de fútbol, de la que también participará la sanidad del club a los efectos de confeccionar una rutina más cuidadosa respecto a la seguidilla de partidos que afrontará Suárez en lo que resta de 2023.

Gremio jugará este jueves a las 19 horas, cuando reciba al América Mineiro por la fecha 11 del Brasileirão, y el domingo volverá a ver acción en su estadio contra el Coritiba a las 16 horas por la fecha 12 del mismo campeonato.

La finalización del certamen está prevista para el domingo 3 de diciembre. En cuestión de cinco meses y medio, el conjunto dirigido por Renato Gaúcho tendrá que jugar 28 partidos del Brasileirão y al menos dos por la Copa de Brasil, torneo en el que disputará cuartos de final a ida y vuelta ante Bahía. A esos dos podrían sumarse dos semifinales y dos finales, por lo que Suárez afronta un mínimo de 30 encuentros y un máximo de 34 en 24 semanas.