Fútbol femenino: Valeria Colman, capitana de Nacional, ya vive el clásico frente a Peñarol

Valeria Colman es la principal referente de Nacional y una profesional full time del deporte. Además de capitanear al plantel mayor, con el que cumple 13 años en este 2022 tras llegar desde Sportivo Artigas del Sauce, está a cargo del equipo sub-14 luego de haber dirigido a las mismas jugadoras en 2021, cuando eran sub-13. También es profesora de educación física en un liceo y viene de ser elegida por la IFFHS en el Equipo Ideal de América en 2021.

El año pasado fue una de las caras visibles del campañón que terminó con el equipo cuarto en la Copa Libertadores en Paraguay, donde las tricolores acariciaron el sueño de Valeria de “subir a un podio en un torneo internacional”. Esa gran actuación desarmó a un plantel que se reconstruyó con canteranas, sin la posibilidad de reforzarse al no haber un período de pases. Así afronta el clásico del domingo a las 15:30 en el Suppici con un equipo que, si bien es competitivo, poco se asemeja al que inició el torneo en setiembre.

Un plantel que se desarmó y se reconstruyó

“Respecto al plantel que inició el campeonato hay muchos cambios. Gracias a la buena Libertadores que hicimos se fueron compañeras al exterior y eso hizo que el plantel perdiera jugadoras muy importantes. Este año recompusimos el plantel ascendiendo jugadoras del sub-19 que estaban alternando con el mayor”, contó la dueña del brazalete tricolor a FútbolUy.

“En este 2022 ya están de lleno en Primera División, así que tenemos un plantel bastante joven en el que también perdimos compañeras por lesión (Micaela Domínguez y Naiara Ferrari). Tenemos un plantel nuevo respecto al que ganó el Campeonato Uruguayo pasado y al que jugó el clásico de este”, agregó la defensora central de 31 años, campeona uruguaya en 2010, 2011 y 2020.

Además de esa sangría que sufrió el último campeón uruguayo con las partidas al exterior de Luciana Gómez, Karol Bermúdez, Esperanza Pizarro, Valentina Morales y Yamila Badell, además de las salidas de Caterin Lima y las hermanas Sabrina y Romina Soravilla, hubo un último receso que afectó a todos los equipos en general y a Nacional en particular por el Sudamericano sub-20.

Amistosos contra hombres y “muchas pilas para el reinicio”

“Con el parate tuvimos siete jugadoras que fueron al Sudamericano y otras que quedamos acá. Recién la semana pasada empezamos a entrenar todas juntas otra vez. Desde el lunes estamos enfocadas ya en el clásico y poniéndole pilas a lo que es el reinicio. Jugar es lo que esperábamos siempre porque para eso entrenamos. En ese sentido estamos felices de volver a tener ese objetivo cada fin de semana. Mucho más nos motiva porque es el clásico y porque prácticamente es el partido que define al campeón”, señaló.

Durante ese período de más de un mes sin competir, jugaron contra hombres. “Eso de alguna manera nos mantenía en algo similar a lo que es una competencia y de exigencia, pero con un plantel cortito porque había siete compañeras en la sub-20, por lo que tampoco era el plantel con el que afrontamos lo que viene porque muchas de esas siete son titulares. La idea principal era mantener las prácticas, el nivel, lo físico y la forma competitiva para cuando volvieran todas y enfocarnos 100% en lo futbolístico”, explicó.

Un partido que define mucho y una rival que requiere atención

Nacional tuvo libre en la primera fecha de la Fase Final, una liguilla de cinco equipos a una rueda que definirá al campeón, y en la segunda goleó 5-0 a Liverpool. Ahora es el turno de Peñarol, que cuenta con una goleadora letal como Belén Aquino, quien llega pletórica de confianza tras el Sudamericano. “Es la jugadora más importante que tiene el rival. La hemos analizado bastante y sabemos a lo que juega”, reflexionó Valeria al respecto.

“Trataremos al menos de repetir lo que hicimos en el último partido contra Liverpool, donde se notó que estábamos muy concentradas y atentas a lo que tenía que hacer cada una y también la compañera de al lado. Lo mínimo es repetir esa concentración y estar muy atentas a Belén y a no darle espacios. Trataremos de que toque poco la pelota porque cuando tiene espacios y puede encarar en velocidad es muy peligrosa”, analizó la capitana tricolor, quien se “sorprendió un poco” al enterarse que el clásico sería en el Suppici.

“Creíamos que Peñarol iba a presentar su estadio porque ya lo ha hecho otras veces, pero estamos felices ya de por sí por volver a jugar. Y está bueno que se incluya al interior y que su gente vaya conociendo más al fútbol femenino. Que no sólo lo vea por AUF TV, sino que lo vea en vivo. Esperemos que la gente de Colonia se anime a ir a vernos y esperamos nosotras darle una alegría”, dijo, y aprovechó para agradecer “el apoyo de la gente que ha acompañado en los partidos”, sobre todo después de la Libertadores. “Es muy lindo entrar a la cancha y tener mucha más gente alentándonos”, comentó.

Nacional: una isla dentro del fútbol femenino uruguayo

Respecto a la evolución del fútbol femenino en Uruguay, elige el camino de la sinceridad y no el de la falsa modestia. “Nacional es un mundo aparte. No podemos hablar del fútbol femenino en general ni comparar lo que vivió Nacional en este corto tiempo de crecimiento con el resto. Falta mucho en lo que es el fútbol femenino local. Tenemos una liga muy pobre, con pocos partidos al año y poco competitiva”, aseguró.

“Tenemos dos o tres partidos realmente competitivos al año y en los demás se nota la diferencia por lo que les da cada club a sus jugadoras en cuanto a condiciones, materiales y gente que está alrededor de un equipo. Lo más básico, como una cancha y un vestuario, pocos equipos lo tenemos. Los que tienen más siempre están peleando el campeonato y se nota mucho la diferencia en la forma física y táctica con los que compiten por competir”, dijo, en referencia a clubes que cumplen con el reglamento presentando un equipo femenino porque así se los exige la Conmebol para participar en sus torneos, pero no por un interés real por el fútbol femenino.

“Nacional en particular creo que está un poco más despegado del resto. Como la selección se nutre básicamente de dos o tres clubes, eso también benefició a la selección. La manera de entrenarse ya no es la misma y al entrenar todos los días llegás con mejor forma física. Antes entrenabas tres veces por semana e incorporabas cosas en la selección. Hoy eso ha cambiado y las jugadoras tienen más herramientas”, valoró, y cerró la nota mostrando el deseo de que Nacional deje de ser esa “isla” que es hoy. “Se necesita que crezcan los demás clubes para que crezca la liga y también la AUF en hacer un formato de campeonato más competitivo y con más partidos”, concluyó.