Independiente del Valle de Ecuador renunció a 12.500 de las 14.000 entradas que le correspondían a su hinchada para la final de la Copa Sudamericana contra São Paulo, y se quedó con un lote pequeño de 1.500 boletos.
El club ecuatoriano se verá en la tesitura de disputar la final en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba, en Argentina, con una clara y contundente inferioridad numérica en las tribunas.
La previsión del equipo de Sangoquí es que viajen hasta Córdoba unos 1.500 hinchas, pues la lejanía y el alto coste del viaje hasta la ciudad argentina han hecho que muchos hinchas ecuatorianos renuncien a presenciar la final en el estadio.
Una buena parte de los 1.500 aficionados del Negriazul que se esperan en Córdoba llegarán en vuelos chárter, entre ellos el del propio club en el que viajarán el plantel y algunos familiares de los jugadores.
No es la primera vez que a Independiente del Valle le toca afrontar una situación similar, puesto que en 2019 ya disputó en Asunción otra final de la Copa Sudamericana contra Colón de Santa Fe donde la hinchada argentina también ocupó prácticamente todo el estadio, lo que no fue impedimento para que los ecuatorianos se alzasen con el trofeo.
En aquella ocasión, Independiente conquistó el primer título internacional de su historia al imponerse por 3-1 con goles de Luis Fernando León, Jhon Jairo Sánchez y Cristian Dájome.