Felipe Carballo llegó a préstamo al NY Red Bull a mediados de agosto, debutó el 31 del mismo mes y desde entonces no faltó a un solo partido. Lleva 10 disputados, un gol importante ante el Columbus Crew para avanzar de ronda en los playoffs de la MLS y una dinámica que va de la mano con la liga. Recuperó la continuidad, ya habiendo dejado atrás una pubalgia que lo llevó a operarse, pero sin la exigencia del maratónico calendario del fútbol brasileño.
Sobre la adaptación a un mercado nuevo, explicó que “para los futbolistas es así, y a veces no tenés tiempo para pensar en lo que está pasando”. “Llegué hace tres meses y el trajín de la mudanza, el cambio de idioma y el hecho de adaptarse a un nuevo club hacen que las cosas vayan pasando muy rápido y uno no es muy consciente de todo esto. Ahora estoy esperando el partido del sábado, que es un paso importante para el objetivo de ser campeones”, contó.
En conferencia virtual con distintos medios, organizada por la MLS, se refirió al encuentro del próximo sábado a las 19:30 horas de Uruguay frente al New York City, el equipo en el que juega el también uruguayo Santiago Rodríguez. Se trata de la semifinal de la Conferencia Este, a partido único, y es la primera vez que habrá derbi en una instancia de playoffs.
El derbi contra Santi Rodríguez: ¿alguna apuesta?
“En la interna del club se vive como cualquier derbi de cualquier lugar del mundo: todos quieren jugarlo y todos quieren ganar. Con el paso del tiempo y la cantidad de clásicos que jugué, aprendí que tengo que hacer todo lo posible para estar tranquilo porque la adrenalina y la concentración llegan el día del partido”, comentó.
Carballo, quien jugó varios Nacional-Peñarol y Gremio-Inter, cree que “hay que tratar de no vivirlo tanto antes y estar tranquilo, haciendo la rutina y la vida normal, como si fuera un partido más”. “Eso lo llevamos adentro y el día del partido te llega todo lo que necesitás”, contó, consciente de que la gente en la calle no lo vive tan pasionalmente como en Sudamérica.
Del otro lado estará su amigo Santiago Rodríguez, excompañero en Nacional. “Hemos estado en contacto, pero no hubo ninguna apuesta porque los dos vivimos el fútbol de una manera muy intensa y creo que él no va a estar muy contento con el resultado y no da para molestarlo mucho. Si fuera al revés, yo tampoco estaría contento”, explicó.
Sobre el estilo de juego que se encontró en la MLS, explicó que se trata de “un fútbol mucho más físico en el que se ataca mucho, vayas ganando o perdiendo”. “Es la esencia de la liga y por eso se dan partidos tan abiertos. En Sudamérica no sucede tanto porque se es más de proteger el resultado”, opinó.
Carballo afirmó que en la liga estadounidense “se corre todo el partido”. “Se presiona muy intenso y el partido no para. Tenés que estar muy bien físicamente, porque si no, se nota. Si un equipo está por debajo de otro físicamente, la diferencia es muy grande”, señaló.
Otro elemento nuevo es la implementación de los playoffs, algo que “puede ser un poco injusto porque es un partido”. Si bien ya jugó con esa modalidad en Copa de Brasil, Libertadores y Sudamericana, a partir de las semifinales de conferencia es un solo encuentro con ventaja de localía para el mejor ubicado de la fase regular.
Nunca favoritos
“Nosotros al haber terminado séptimos, solo jugaríamos en casa contra Atlanta. Se nos hace un poco cuesta arriba, pero es el precio a pagar por no haber terminado tan arriba en la clasificación. El hecho de que no esté el principal candidato [Inter Miami] es algo que motiva a todos los equipos porque todos estamos con chances de campeonar”, comentó.
Si bien dejaron por el camino al Columbus Crew, el último campeón, no cree que su equipo sea candidato. “Es importante no ponerse esa etiqueta. Le ganamos a uno de los candidatos pero todos los equipos que quedan son buenos y no es bueno sentirse más que otro por haber ganado algún partido. Vamos a ir de la misma manera que enfrentamos a Columbus Crew, con mucha humildad y confianza de lo que somos capaces”, expresó.
Y más allá de esta temporada, le queda otra por delante porque su período de cesión es por un año. “Quiero quedarme acá porque vine a préstamo. La idea es jugar bien y tratar de hacer lo mejor para el club para poder seguir acá. Red Bull tiene una estructura muy grande a nivel mundial y creo que será importante para el día de mañana, si se hacen las cosas bien, poder ir a otro lugar y seguir creciendo desde ahí”, manifestó.
La selección, la pubalgia y Nacional
Consultado por la selección uruguaya, dijo haber visto todos los partidos. Debutó en marzo de 2023 en los amistosos disputados ante Japón y Corea del Sur durante el interinato de Marcelo Broli, y con Marcelo Bielsa al frente del equipo jugó ante Nicaragua y Cuba en la preparación, y tuvo tres presencias durante las Eliminatorias. Mientras estuvo disponible fue convocado, pero una rebelde pubalgia lo obligó a operarse en diciembre y perdió pisada.
“Obviamente vi los partidos. El contacto con algunas personas de la selección sigue estando porque en las últimas nóminas he estado reservado, pero no en la convocatoria final. A uno lo hace motivarse porque está a un pasito, pero algo está faltando. Si bien sé lo que Bielsa les pide a los jugadores en mi puesto, trato de ver a [Federico] Valverde y [Rodrigo] Bentancur, que son los más parecidos en cuanto a la posición, para seguir aprendiendo”, dijo.
En Brasil, entre el apretado calendario local y los llamados de la selección, trató de “soportar el dolor a como diera lugar para poder seguir” a finales del año pasado, pero el problema “terminó afectando más de lo que esperaba”. “El hecho de venir a Nueva York fue buscando aflojar la cantidad de partidos, que en Brasil es demasiada, para poder recuperarme”, explicó.
“Fue una decisión acertada porque me siento impecable y de maravilla tras la cirugía. Todo viene bien, y el hecho de estar en Nueva York, que es un lugar hermoso, ayuda a la cabeza. Vinieron mi madre y mi hermano. Si bien la distancia complica para que las visitas sean más seguidas, ayuda que sea una ciudad tan linda y hace que la gente quiera venir a visitar y conocer la ciudad. Voy a estar esperando a mi familia y amigos porque lo considero algo muy importante para lo mental y poder estar bien para jugar”, indicó.
Antes de ir a jugar al Red Bull hubo un llamado de Sebastián Eguren para su vuelta a Nacional, pero no prosperó. “No dependía de mí ni de Nacional. Era algo en lo que estaba Gremio en el medio, con cosas contractuales y económicas que no se entra en detalles. Era una decisión del club pero no había mucho para hacer. El contacto con Seba siempre está porque generé mucha amistad cuando me tocó jugar con él”, concluyó.