La anfitriona Alemania logró el pase a cuartos de final de la Eurocopa tras dominar 2-0 a Dinamarca en Dortmund, en un partido marcado por una pausa debida a una tormenta.
Un penal transformado por Kai Havertz (53) y el tercer gol en el torneo de Jamal Musiala (58) sirvieron para decantar el partido a favor de la 'Mannschaft' contra la 'Dinamita Roja', que al igual que en la fase de grupos se mostró combativa y con opciones.
Alemania, que venía de empatar su último encuentro en el Grupo A contra Suiza (1-1), se reencontró con la victoria tras un partido trabajado, en el que tuvo que sobreponerse a sustos e inclemencias para asegurar su presencia el próximo 5 de julio en Stuttgart, sede de los cuartos de final.
Una de las señas de identidad de los hombres de Julian Nagelsmann en este torneo es la alta intensidad que aplican a los partidos en los primeros minutos, y en el Westfalenstadion volvieron a hacer gala de ello.
Nico Schlotterbeck remató de cabeza un saque de esquina botado por Toni Kroos y el defensa del Borussia Dortmund creía haber marcado su primer gol con la 'Mannschaft' pero el tanto fue anulado por falta de Joshua Kimmich (4).
Pausa
El propio centrocampista del Bayern Múnich contó con la siguiente gran ocasión de los locales, detenida por Schmeichel (7), que minutos después volvió a evitar un gol, esta vez de Havertz (10).
El huracán alemán comenzó a amainar y Dinamarca comenzaba a llegar tímidamente al área rival, con un disparo de Christian Eriksen rechazado por Antonio Rüdiger (31), pero entonces las nubes negras que merodeaban el Westfalenstadion desde el inicio del partido, dieron paso a una gran tromba de agua y tormenta eléctrica.
El árbitro inglés Michael Oliver tuvo que enviar a los jugadores de ambos equipos a los vestuarios, mientras las pantallas gigantes informaban de la situación a los 60.000 aficionados.
Durante los 25 minutos que duró la pausa muchos de ellos se quedaron en las gradas cantando, y otros, expuestos al agua que caía en cascadas desde el techo por las cuatro esquinas del recinto, se protegieron en los pasillos interiores.
Una vez paró de llover, el árbitro inglés Michael Oliver permitió a los jugadores saltar de nuevo al terreno de juego para un breve calentamiento, antes de reanudar el partido con un bote neutral, y sólo dos minutos después, Schmeichel detuvo con el cuerpo un gran cabezazo de Havertz (37).
De héroe a villano
Llegó entonces la mejor ocasión de Dinamarca, luego de que una peligrosísima pérdida cerca del área pequeña de Schlotterbeck fuera recuperada por Rasmus Hojlund, quien mandó al lateral de la red (41). El delantero del Manchester United contaría con otra gran ocasión antes del descanso salvada por Manuel Neuer (45).
Ya en el segundo tiempo, Joachim Andersen pasó de marcar un gol anulado por fuera de juego (50)... a cometer la mano que castigó Havertz desde el punto de penal (53).
Otro relámpago de Havertz (59) pudo haber supuesto el 2-0 pero finalmente este llevó la firma de Jamal Musiala, que definió a la perfección un cara a cara en el área, tras un gran pase largo de Schlotterbeck.
Y así, sin brillar en exceso pero dominando en el caos, Alemania logró un boleto a cuartos en los que se medirá al vencedor del España-Georgia del domingo.