“Ante un rival con semejante jerarquía, como el último campeón, era un partido difícil en lo previo y se dio así, muy complicado. Fue un partido lindo de mirar de afuera, no de estar adentro, porque adentro se sufre”, dijo Eduardo Espinel, entrenador de Racing, tras el 1-1 frente a Peñarol en el Campeón del Siglo.

“Peñarol por momentos tuvo la iniciativa y nosotros controlamos algunos circuitos que creíamos que eran necesarios, como Gastón Ramírez y Leonardo Fernández, que no queríamos que jugaran tan cómodos. Por momentos se dio, pero cuando los encontraban, fundamentalmente en el segundo tiempo, nos complicaban”, agregó en diálogo con VTV.

“Nosotros, siempre con el trabajo táctico, tratamos de hacer el plan de juego que se planificó. Por momentos salió bien y tuvimos nuestras chances. Si hubiéramos estado más calmados en algunas transiciones podríamos haber hecho más daño”, añadió.

“Pero venir a este escenario, ante este rival, y sumar en un Campeonato Uruguayo en el que cada punto vale oro, es positivo desde el punto y desde el trabajo de los muchachos”, ponderó Espinel, quien más allá de las importantes bajas que sufrió su plantel, que “es corto”, aclaró que “si hay algo que no tiene este equipo son excusas”.

Sobre la doble competencia que afrontó desde el inicio de la temporada, dijo que “no es excusa pero costó mucho, desde lo físico y lo psicológico”. “Eso lo sabíamos al principio de año. Más allá de que se sufre, es lindo jugar doble competencia”, ponderó.

“Estamos orgullosos de lo hecho en este semestre, con mucho camino por recorrer y en posición de clasificación a copas. No podemos dejar de trabajar todos los días, que es lo que nos llevó a donde estamos ahora”, concluyó.