Un hecho particular se dio este sábado en el estadio Nuevo Los Cármenes donde Real Madrid goleó al Granada por 4-0 y fue que tras 50 partidos, Federico Valverde no vio acción en el merengue que dirige Carlo Ancelotti.
El volante, al que el italiano definió como un “jugador de equipo” y por eso su relevancia en el funcionamiento del campeón de la liga ibérica, estuvo en el banco en un duelo donde los blancos utilizaron suplentes, para darle descanso tras la clasificación a la final de la Champions tras vencer al Bayern Múnich entresemana.
Nuestro compatriota y pieza clave de la selección uruguaya, había enlazado hasta este sábado 50 partidos viendo acción con al menos un minuto en cancha, lo que habla de su importancia para el presente de su conjunto.
Con una posición más defensiva en zona de volantes lo que llevó, lógicamente, a reducir la cuota goleador de 12 goles en la pasada temporada, pero manteniendo la misma cantidad de asistencia con siete.
Corriendo por todos, cubriendo espacios y siendo el pistón anímico del Real, a sus 25 años ya lleva once títulos con el conjunto español y podrían ser doce ya que jugará la final de la Champions en Wembley ante Borussia Dortmund. Todo eso en seis temporadas.