El partido comenzó como se preveía, con Barcelona dominando y saliendo a buscar el triunfo que le diera el título liguero, algo en caminó a los siete minutos.
Y es que luego de controlar el balón y tener alguna aproximación sobre la valla de Rubén Martínez, una jugada que inicio Suárez, derivó en Dembelé por derecha quien asistió a Coutinho y este con disparo potente de primera puso el 1-0 parcial.
Un par de chispazos de Messi, que probó de cabeza primero y luego obligando a volar al golero local tras un tiro libre, más un intento a distancia de Coutinho, trataron de aumentar diferencias para los balugrana, algo que no consiguieron.
Deportivo buscó desequilibrar en las pelotas quietas y con centros al área en los que ganaban con asiduidad, teniendo Fabian Schär la chance de igualar que no puso concretar, algo que pagó a los 37'.
Allí se juntaron los dos genios de ataque: Luis Suárez recibió por derecha y puso un pase mágico (séptima asistencia en la temporada) con cara externa del pie para Messi que ingresó a velocidad para marcar el 2-0 en el juego.
Pero cuando todo era una fiesta culé, Lucas Pérez en una jugada rápida, apareció en el área a los 40' para descontar y poner al Deportivo en partido (1-2), resultado con que se fue la primera etapa.
Los de siempre
En el segundo tiempo, los de Valverde tuvieron un arranque propio de su estilo de juego, con mucho toque y paciencia para encontrar los espacios y definir, donde Messi tuvo un par de chances que no logró anotar.
Pero Deportivo no se rindió nunca y ofendía a la floja defensa culé, algo que le redituó en el empate a los 63' cuando una jugada por derecha de Correia terminó en un centro que recibió Borges en el área y asistió a Emre Çolak que no perdonó y puso el 2-2 parcial.
Pero cuando el partido estaba cuesta arriba, la yunta de atacantes de los azulgranas no perdonó una vez más. Dos pases espectaculares de Luis Suárez para que Lionel Messi marque por duplicado sentenciaron el juego por 4-2 y desató la fiesta de los catalanes que se quedaron con su liga número 25 y la séptima de las última diez.
El festejo de los visitantes en cancha marcó la tranquilidad con que se quedaron con el título, donde aún se mantiene invictos y fueron por lejos el mejor equipo.