Gonzalo Jara es muy recordado en Uruguay pese a que actualmente, a sus 38 años, ya no participa de las convocatorias de la selección chilena y defiende la camiseta del humilde Coquimbo Unido de su país. En 2015, en la Copa América, fue protagonista de un cruce con Edinson Cavani, en el que metió su dedo en una zona íntima del uruguayo.

A partir de ahí, fue foco de críticas y odio por gran parte de los orientales, además de que se perdió la definición de la Copa por una suspensión de tres partidos por oficio. Este jueves, previo al debut en Eliminatorias de ambas selecciones, palpitó el partido en una charla con Todo es cancha, que se emite por YouTube. “Lo haría todo igual”, aseguró, y añadió: “Nosotros sabíamos y lo hablamos en el camarín, que Uruguay no quería que se jugara el partido. Ellos se salieron mal de la cabeza, se calentaron demasiado. Cada falta era una discusión y así pasaban 20 o 30 segundos”.

“Ese partido traía condimento. Son partidos que no solo se juegan en ese momento, venimos jugando contra los mismos rivales desde las divisiones juveniles. Nos conocemos desde los 20 años y las calenturas vienen desde mucho tiempo”, ahondó el zaguero. “Eran discusiones de ‘chilenitos nunca ganaron nada’ y eran cosas así que te hacen calentar, pero sabíamos que de jugar a jugar le podíamos ganar. Nos iba a costar muchísimo porque los uruguayos son los que mejores juegan las definiciones de octavos para adelante”, siguió.

Luego, elogió a Marcelo Bielsa, actual DT de Uruguay y que lo dirigió en La Roja entre 2007 y 2011: “Voy a ser un agradecido toda la vida. Me enseñó a ver el fútbol desde otro punto de vista y ojalá lo hubiera tenido más joven. Donde pasa, deja su huella. Bielsa sacaba lo mejor de nosotros y su cuerpo técnico también”.

Y finalizó comparando la situación de Marcelo Salas, histórico goleador de Chile, con las de Luis Suárez y Edinson Cavani: “Yo lo admiro como referente, como jugador de selección. Son jugadores que marcan una diferencia por la experiencia y tal vez no vienen en su mejor nivel, pero estando dentro de la cancha marcan mucha referencia. Los rivales están muy pendientes y Marcelo era un ídolo”.