Cada escenario deportivo de los clubes uruguayos tiene su particularidad, una que resalta, esa que el hincha del club abraza, cuida o destaca como parte de su idiosincrasia.
Danubio, en Jardines del Hipódromo, tiene la famosa palmera, que luce erguida como patrón de referencia cada vez que los franjeados son locales en su feudo.
Pero una situación particular hace que la preocupación en Maroñas sea importante. Un mal aqueja al emblemático árbol, lo que hizo que la directiva de la institución tomara decisiones y así hacer los máximos esfuerzos para salvarla.
La palmera, referencia del fútbol local, fue atacada por un insecto considerado plaga, el denominado picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus). El insecto se desarrolla en el interior de esta, principalmente alimentándose del tejido blando, pudiendo coexistir al mismo tiempo en sus cuatro estados: huevo, larva, pupa y adulto.
“Está agonizando, y con ella está agonizando una parte de la historia de Danubio”, comentó Carlos Mena, uno de los socios y dirigentes danubianos que fue parte de la llegada del árbol al lugar en el que se encuentra.
“El lunes, en reunión de directiva, llegó la mala noticia y fue algo que nos conmovió a todos”, contó a Fútboluy, y expresó: “Ya se habían tomado las precauciones del caso con anterioridad, dándole dos inyecciones preventivas, pero evidentemente no fue suficiente”.
En la historia
Mena narró la historia de la palmera que está en Jardines desde “los años 80”, y recordó que junto a algunos socios de Danubio la encontraron en un basural, la rescataron y la pusieron en la cancha.
“Éramos parte de la barra de banderas, y al estar cancelada por reformas la tribuna detrás del arco, tuvimos que ir a la que actualmente está plantada. Mientras caminábamos hacía allí, la encontramos en un basural, cortada, con un tronquito muy pequeño y con Walter (un socio histórico) decidimos llevarla al estadio para usarla como sombra”.
“Cuando llegamos encontramos un pozo hecho, que tenía agua, y allí la plantamos. Allí permaneció varios años sin crecer, como diez, hasta que enraizó y se transformó en lo que es hoy en día”, expresó.
En el año 2004, en un partido ante Cerrito, un grupo de hinchas de los auriverdes intentó quemarla, “pero resistió para transformarse definitivamente en el emblema que es para todos nosotros”.
Buscando salvarla
El lugar donde se ubica el árbol es conocido como la Tribuna de la Palmera. Con identidad, fue marcando su presencia ante propios y extraños, aunque ahora lo que ganó a los directivos danubianos es una gran preocupación.
“Es el único ser vivo que está las 24 horas presente en nuestra cancha y todos los hinchas la adoramos, por eso la directiva resolvió hacer los máximos esfuerzos por intentar salvarla”, expresó Mena.
“Se decidió llamar a técnicos especializados de diferentes áreas para decidir el camino a recorrer por revertir una situación muy compleja. Hay que tratar de inhibir este bicho que la ataca por dentro, buscando una mejoría”, agregó.
“La palmera es Danubio y por eso estamos todos preocupados, ojalá podamos revertir esta situación en la que se encuentra”, cerró diciendo.