Diego Aguirre participó del podcast de Alexandra Pose y se sometió a un divertido juego que consistía en armar su “jugador perfecto”, utilizando cualidades de futbolistas con los que haya coincidido, ya sea como compañeros o dirigiéndolos.
Primero comenzó eligiendo el pie derecho de Pablo Bengoechea, ídolo de Peñarol, y el izquierdo de Leonardo Fernández, a quien seguirá disfrutando en el Carbonero ya que el club compró el pase del mediapunta que la rompió el año pasado.
En velocidad, nombró a Daniel Pollo Vidal, compañero suyo en el Aurinegro entre 1986 y 1988. En pase volvió a optar por Fernández y en fuerza se fue a por Fabián Canario Césaro, a quien dirigió en 2003, año que Peñarol fue campeón uruguayo.
Sorprendió al elegir a Juan Manuel Olivera en definición, pero no así en tiros libres, cuando volvió a nombrar a Fernández. Luego destacó la inteligencia de Gastón Ramírez, el dribbling de Venancio Ramos y, por último, el peinado de Nahuel Acosta.