La expectativa por el duelo revancha de cuartos de final de la Copa Libertadores de América tuvo uno de sus puntos altos con el recibimiento que le dieron los hinchas a Peñarol en su salida al terreno de juego.

Bengalas de colores en la tribuna, humos amarillo y negro, y fuegos artificiales de mayor porte que se lanzaron desde fuera del escenario dieron un marco increíble a la salida.

Gritos de aliento y arenga para Diego Aguirre que se colocó en el banco de suplentes y otros tantos para Aguerre cuando fue rumbo  a uno de los arcos.  

“Esta locura ya no puede parar porque se lleva en la sangre, es la locura de ser de Peñarol un amor inexplicable. Solo una cosa quiero antes de morir, ganar la sexta junto a toda esta gente. Que todos sepan que volvió Peñarol, el capo del continente”, fueron las estrofas que entonó la gente durante varios minutos.

Tanto fue el humo que se generó que el comienzo del trámite se debió atrasar hasta que se apagaran las bengalas y se dispersara el humo.

Otro momento distinto fue cuando se realizó el minuto de silencio en recuerdo a Juan Izquierdo que la gran mayoría de los presentes aplaudió como forma de adhesión.