Mario Szlafmyc, entrenador de Central Español, fue protagonista de un final caldeado en la victoria de su equipo por 2-1 este miércoles en el inicio de la quinta fecha del Campeonato Uruguayo de la Segunda División Profesional en el estadio Charrúa.
El director técnico de los palermitanos tuvo un intercambio verbal con Federico Velázquez, a quien conoce de su etapa trabajando en el cuerpo técnico de Luis ‘Ronco’ López en Rampla Juniors. El capitán de Albion le apoyó el dedo en la cara y el DT se echó hacia atrás. Luego, un integrante del cuerpo técnico rival le dio un golpe y cayó al césped sintético. La exageración fue tendencia en las redes sociales.
— Videos (@nmvideos10) June 30, 2021
“Se habla de que hice una actuación, cuando lo que quise fue escapar de la situación. Mis movimientos fueron exagerados como manera de escape, porque si reaccionaba de otra manera terminaba en una trifulca. Es más importante prevenir estas situaciones que darle color a ver si hice una actuación o no”, contó Szlafmyc al programa ‘100% Deporte’ de Sport 890.
“Se dijo que me metí con un jugador de Albion, pero nunca lo hice anoche ni en mi carrera. Hice un reclamo al árbitro pidiendo una expulsión, cosa que pasa constantemente en todas las ligas del mundo. Después recibí una amenaza en voz alta desde el área de un jugador de Albion -te espero afuera-, pero entendí que quedaba en el momento. Por eso volví a pedirle al árbitro la expulsión del jugador, pero son cosas que quedan en la cancha. Son situaciones donde uno busca sacar una ventaja deportiva y el rival marcar presencia”, narró.
“Nunca en mi vida me vi envuelto en una situación de violencia. Lamentablemente me vi agredido. No fue una agresión que me lastimara, pero sí me manosearon la cara con un empujón la primera vez, y la segunda más fuerte. Me vi en una situación de agresión y no encontré otro camino que echarme hacia atrás para escapar de la situación, que era lo que quería. En ningún momento quise generar ningún tipo de violencia, sino evitarla”, añadió.
“Quizás mi reacción no fue la mejor, pero estoy un poco molesto porque me han llegado un montón de mensajes viendo que fui agredido dos veces, más allá de la intensidad de la agresión. No soy una piñata para que me manoseen la cara dos veces ni tampoco tengo tres años, pero veo que se habla más de que caí al piso que de la agresión”, concluyó.