El entrenador de Peñarol, Diego Aguirre, llevó tranquilidad y manejó con humor el momento de tensión que se vivió promediando el segundo tiempo en la victoria ante Rampla Juniors (4-0) cuando Leonardo Fernández pidió asistencia médica en la cancha por un dolor en el tobillo.
Si bien se lo vio molesto, el jugador retornó al campo e incluso anotó de penal uno de los goles carboneros, para que luego el entrenador lo terminara sacando a los 79’ para el ingreso de Felipe Avenatti.
Aguirre al ser consultado sobre el estado sanitario del jugador teniendo en cuenta el partido del próximo jueves ante Flamengo en el Maracaná por cuartos de final de Copa Libertadores, llevó tranquilidad con sus palabras.
“Está diez puntos, volando”, dijo primero y fue incluso a más: “Está notable y preparado, a full para lo que viene”.
Al recordar el momento que Fernández cayó en cancha y debió ser atendido por la sanidad, la Fiera dijo con un toque de humor: “Fue un chiste de mal gusto, no se hace eso (entre risas). Sería algo muy feo perder a Leo con lo importante que es y transmite al equipo, pero por suerte no pasó nada”.