"Mucha angustia y dolor", dijo Mathías Cardacio sobre el descenso de Defensor Sporting a la Segunda División del Campeonato Uruguayo. "Muchas cosas se te pasan por la cabeza y querés entender por qué sucedió esto en el ámbito deportivo, que es lo que me incumbe", agregó.

"Es difícil y lo que uno más quiere es pedirle perdón al hincha y al socio. Fue un año duro. Que se le va a ser. Es lo que nos tocó", aseguró el volante de 33 años en una entrevista con el programa Cien por ciento deportes en la Sport890.

Cardacio se refirió a lo duro que fue el encuentro ante Cerro Largo en el Ubilla de Melo, donde se cerró el descenso: "Fue un partido complicado en Melo: el rival se jugaba mucho por entrar a la Sudamericana y nosotros teníamos uno de esos juegos que a uno no le gusta porque le podíamos complicar la situación del club".

"Cuando llegó el gol de Boston River, nos fuimos al todo o nada que nos depositara en una final con ellos. El partido con Cerro Largo fue difícil de sobrellevar, pero el descenso no fue por eso. Las razones: no conseguimos regularidad en la temporada, no logramos dos victorias seguidas en el campeonato, pasaron tres entrenadores y luego te preguntás qué pasó", explicó.

"El descenso es difícil y más por la historia que acarreaba Defensor. Es la primera vez que me pasa algo así. Pero la caja de resonancia es distinta. Porque no es lo mismo descender con un equipo que está habituado a esto que con Defensor. La responsabilidad y la presión es otra", manifestó.

El Bochita contó una de las claves por las cuáles Defensor Sporting volvió a la Segunda División tras 56 años: "Nos costó darnos cuenta de cambiar el chip. De dejar de pensar en los puestos de copa y abocarnos en el descenso mucho antes del tiempo. Cuando nos dimos cuenta ya estábamos muy enredado en la situación. Pero al final queda pasar raya y pedir perdón".

"El golpe es durísimo para los más chicos. Seguro que a ellos se le vienen muchas cosas en la cabeza, pero ahora vienen nuevas cosas. Defensor va a volver a Primera y sé que van a poder cumplir sus sueños con el club que los formó", apuntó.

Se refirió a las diferencias entre pelear un título a estar en el tema del descenso: "No se compara porque te das cuenta en el día a día. Lo ves en los dirigentes y en el cuerpo técnico. Todo el nerviosismo se va a trasladando al plantel. Aunque, así y todo, el equipo salió a jugar todos los partidos con mucha entrega". Agregó: "Me prepare más que cuando me tocó salir campeón".

Habló sobre la directiva de Defensor Sporting por este duro momento: "En un tema como este tenemos que estar todos juntos. Ellos se pudieron equivocar, pero nosotros no la metimos y tampoco evitamos los goles".

"A nivel de la directiva, ojalá el club sane porque se que no está bien. Ellos están para tomar decisiones erradas o acertadas. Es momento de dar la cara, hacer un análisis y sacar a Defensor Sporting de esta situación lo más rápido posible", puntualizó.

Dejó en claro que él está dispuesto a jugar en Segunda División: "Si Eduardo (Acevedo) quiere, acá estoy para dar la cara. Porque después de un resultado deportivo como este no puedo pretender que no haya cambios. Pero soy consciente de que hay que traer a Defensor Sporting a Primera División lo antes posible".

"Es un tema de orgullo y vergüenza deportiva. Me maté para que Defensor se quedara en Primera División, pero estoy a la orden para jugar en la Segunda División para dar la cara por el equipo y que vuelva al lugar donde debe estar", aseguró.

Por último, contó la desagradable situación que vivieron los jugadores de Defensor Sporting: sus autos fueron apedreados tras consumarse el descenso en Melo.

"Haber llegado a Melo y tener esa situación. Da mucho dolor porque no se tomaron las medidas previas a esta situación. Es un momento jodido. Ver los autos todos rotos, con los asientos de los bebes. Es jodido y muestra todas las miserias humanas", concluyó.