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La posible llegada del delantero marfileño Ake Loba, procedente del Mazatlán, marca un nuevo capítulo en la historia de Peñarol con jugadores africanos, que tuvo su inicio en 1980 bajo la presidencia de Washington Cataldi.
En aquel año, el histórico dirigente, en la búsqueda del “nuevo” Alberto Spencer, apostó a la llegada del delantero ghanés John Yawson, que en un principio solo podía jugar amistosos porque no estaba habilitado por FIFA por temas reglamentarios.
Luego se lo habilitó y debutó con la casaca mirasol el 6 de mayo de 1981, ya con Luis Cubilla como entrenador, en un empate 0-0 contra Bella Vista en el Estadio Centenario.
Vio acción en cinco partidos y se convirtió en el primer africano en jugar la Copa Libertadores. Se fue del club a finales de 1981.
También arribaron los sudafricanos Abednigo Shaka Ngcobo (12 partidos), otro delantero, y el volante Goodenough Ace Nkomo (13 partidos), quienes no tuvieron el destaque deseado y se terminaron yendo al corto tiempo.
“El futuro del fútbol está en África”, habría dicho Cataldi en su momento, pero la apuesta realizada no se volvería a repetir por largo tiempo.
Más recientes
El 18 de enero de 2002, firmó contrato con Peñarol Joseph Akongo, un delantero que, a sus 24 años, llegaba desde la reserva del Metz de Francia a probarse al cuadro aurinegro. Si bien el entrenador Gregorio Pérez le bajó el pulgar tras verlo en algunas prácticas y amistosos ante cuadros del interior, en los que tuvo buenos desempeños, el presidente José Pedro Damiani insistió en su fichaje y se dio el gusto.
El ariete africano supo ganarse la simpatía del público, aunque nadie supo bien por qué. Era simpático, le daba besos a la camiseta y se entregaba a pleno. Por eso, cada vez que entraba, lo ovacionaban.
En siete partidos del Torneo Clasificatorio, Akongo metió dos tantos: el 1-0 parcial en lo que fue empate a uno con River Plate; y el quinto de un 5-2 a Juventud de Las Piedras, que fue un golazo. Además, le hizo uno de cabeza a El Nacional de Quito, sellando un triunfo 3-0 por la fase de grupos y convirtiéndose en el primer africano que anotó para un cuadro uruguayo por Copa Libertadores. El camerunés totalizó 296 minutos en cancha repartidos en 10 cotejos oficiales y marcó tres goles, a un promedio de uno cada 99 minutos.
El periplo de Akongo en Peñarol se encaminó abruptamente a su fin al finalizar el primer semestre de aquel 2002.
El último
A mediados de 2007 se dio la llegada del último africano a Peñarol, en este caso el volante Audu Mohammed, jugador nigeriano que llegó al club proveniente de Tacuarembó y con su característica principal forjada en la velocidad.
El jugador llegó al país en 2004 para jugar en Cerro, pasó por Nacional, Tacuarembó y, tras una gran campaña en el equipo del interior del país, recaló en los carboneros bajo la dirección técnica de Gustavo Matosas.
Vio acción en tan solo ocho partidos, sin goles, ni asistencias completando 541 minutos en cancha y viendo una tarjeta amarilla.
A principios de 2008 pasó a Wanderers, volvió a Bella Vista, Tacuarembó y se retiró actuando en Deportivo Maldonado en 2011.
¿Será Ake Loba el sexto africano en llegar a debutar con la Primera División de Peñarol? Es tan solo cuestión de dejar correr las horas para saberlo.
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