Cristhian Stuani fue gran protagonista de la campaña del Girona por sus goles y no ocultó la emoción ni las lágrimas este domingo en el estadio del Tenerife, donde contribuyó con un gol para el 3-1 que le dio el ascenso al equipo catalán.
En las celebraciones hubo un abrazo emocionado con sus seres más cercanos. El talense de 35 años se dio un primer abrazo con su hija Josefina, de 15 años, y luego con Ximena Pippo, con quien cumplirá 12 años de casado esta semana. Luego se sumó Constantino, nacido en noviembre de 2013.
Stuani se acordó de su familia en las declaraciones posteriores al encuentro y espera seguir haciendo goles en La Liga, más allá de saber que el promedio anotador de esta campaña es insostenible en la máxima categoría.
Para este ascenso, Stuani jugó 41 de los 46 partidos que disputó el Girona contando fase regular y playoffs, de los cuales fue titular en 30. Completó los 90 minutos en 18 oportunidades y registró 24 tantos en 2.894 cotejos, lo que hace a un promedio de un gol cada 120 minutos.
Una família de primera! ????????????? pic.twitter.com/jvfTh9kVl1
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?? La festa direcció a Girona! ?? pic.twitter.com/NFQUQFEq3h
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Antes del partido ante Tenerife, Stuani escribió una nota en un papel que se transformó en vaticinio.
Antes de salir hacia el Estadio no podía dejar de pensar en lo que se nos venía encima
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Escribí esto estaba convencido que haríamos Historia
De esos días que quedarán para siempre en nuestros corazones @GironaFC
19-06-2022 pic.twitter.com/eswhRhErXB