Nacional comenzó el partido de buena manera, planteando una presión alta sobre su rival y apostando a manejar la pelota lejos del área de Conde, lo que les daba aire y opciones de ataque.
Remates de Sebastián Fernández primero y Tabaré Viudez después fueron las primeras aproximaciones albas que dominaba el trámite y no pasaba sofocones.
Pero a los 18' San Lorenzo encontró un gol totalmente fuera de contexto e inmerecido. Una pelota cruzada de Pereyra, la bajó Reniero en el área y tiró fuerte hacia el medio, para que Rodrigo Erramuspe, que trató de despejar, venciera a Conde y anotara el 1-0 parcial.
Este quiebre en las acciones hizo crecer a los de Boedo, que incluso tuvieron la chance del segundo en un disparo del propio Reniero, que superó a Conde y Fucile sacó en la línea para apagar las alarmas.
Los de Biaggio ya mostraban otra dinámica en cancha, muy diferente a la del inicio del juego e incluso a los 32' conseguirían el segundo festejo en el cotejo.
Es que una salida equivocada de Nacional propició un robo en mitad de la cancha, una corrida de Zalazar, la pelota derivó en Blandi en el área y este ajustició a Conde para el festejo azulgrana.
Movidito
El arranque del complemento mostró a los de Medina otra vez con buenos minutos iniciales, donde probó con un disparo de Aguiar y luego con una corrida de Bergessio, donde Navarro anticipó.
Pero los argentinos también tuvieron su chance y entre Zalazar, Blandi y Mouche no supieron vencer a Conde para marcar el tercero antes de los 60'.
Pero Medina con dos cambios logró organizar el equipo, dando ingreso al "Colo" Romero y Brian Ocampo, que ayudaron a estabilizar el equipo.
Y la gran chance llegó a los 69' cuando una pelota al área de Tabaré Viudez la fue a buscar Oliva, que fue derrivado por Pereyra inocentemente y el árbitro pito penal.
Gonzalo Bergessio con toda su experiencia tomó el balón y remató cruzado y puso un gol clave, no sólo por ser el del descuento, sino por conseguir inflar las redes de visitante.
Un tanto que hizo crecer a los tricolores, que nuevamente cometieron una equivocación cara,que les costó el tercer gol.
De un corner a favor, los visitantes quedaron mal parados y en una contra rápida Gudiño se escapó rumbo al arco de Conde, enganchó y Ocampo lo bajó, cobrándose otra pena máxima, ahora para los de Biaggio.
Nicolás Blandi tomó la pelota y definió con clase para asegurar el 3-1 que les da a los de Boedo dos goles de ventaja para la revancha.
El final del partido llegó sin mayores llegadas sobre los arcos y dejó sellada la obligación de Nacional de dar vuelta la serie en su cancha, algo que no es imposible, pero si bastante complejo.