El partido comenzó con Peñarol tratando de presionar la salida rival y atacar por las bandas, principalmente por el lado de Brian Rodríguez, aunque los brasileños se defendían con la pelota, queriendo adelantarse en bloque.
Los visitantes parecían mucho más cómodos con el trámite del juego y atentos a cualquier falla que les diera la chance de conseguir la ansiada apertura, la que sucedió a los 17'.
Una salida con el pié de Dawson que intentó habilitar a Gio González quedó corta y Marcos Paulo peleó, recuperó y asistió a Yony González que definió con precisión para el 1-0 parcial.
Un golpe duro para los de Diego López que no encontraban soluciones ofensivas, con Gastón Rodríguez sin entrar en acción y Viatri peleando de espaldas al arco, perdiendo más de las que ganó.
Por si fuera poco, a los 33' perdió uno de sus bastiones en la mitad de la cancha, cuando Guzmán Pereira debió salir sentido, ingresando en su lugar Jesús Trindade.
Recién en los minutos finales de ese primer tiempo los carboneros pudieron pisar el área rival con un cabezazo de Gastón Rodríguez tras centro de González y luego tras un disparo de Jesús Trindade, ambos intentos conjurados por el arquero Muriel. Nada movió el 1-0 con que Fluminense se fue arriba al descanso.
Errores que se pagan
En el complemento Fluminense salió dispuesto a adelantarse un poco más en la cancha ante un conjunto aurinegro que no era claro en la salida del fondo y su fútbol no tenía fluídez.
Corrida individuales, proyecciones solitarias y algún centro al área era lo que generaba el aurinegro en cancha, sin lograr poner en apuros a su rival.
Pero los norteños comenzaron a realizar faltas en su terreno de juego una y otra vez, lo que agrandó a los locales, que por arriba empezaron a complicarlos e incluso tuvieron la chance del empate en un balón pasado que tocó Gastón Rodríguez y Muriel pudo despejar.
En el mejor momento de los de Diego López cayó el segundo del "Flu", con otro mal manejo del balón que terminó con Ganso con el esférico en sus pies y un pase medido a Yony González, que otra vez fue implacable ante la salida de Dawson para el 2-0 parcial.
Este festejo terminó de apagar el partido, aunque a los 90' apareció toda la calidad de Brian Rodríguez para salir del libreto, generar una estupenda jugada por derecha y meter una asistencia precisa para que Gastón Rodríguez pudiera definir y poner el descuento.
Un gol que limó en algo la distancia, pero que no termina de dejar muy cuesta arriba una serie en la que Peñarol deberá obligatoriamente ganar de visitante y al menos marcar dos goles para ilusionarse, ante un Fluminense que en la ida, fue superior.