El partido comenzó con Liverpool manejando la pelota y tratando de conseguir un gol que les diera la chance de manejar con mayor tranquilidad el juego, el que pudo llegar con un remate de Guastavino que el golero logró despejar en los primeros minutos.
Pero de a poco el trámite se emparejó y los norteños tuvieron sus chances, principalmente tratando de generar por la banda derecha, donde Artur con velocidad complicaba a la última línea.
Gregore era pistón del fútbol y con algún remate de media distancia trató de sorprender a Bava que respondió siempre bien, asentado por una dupla de zagueros negriazules que sacaron una y otra vez, principalmente con una gran labor de Makuka.
La visita sabía que tenía que anotar (cayeron 1-0 en la ida) y trataba de plantear el juego en cancha rival, pero carente de ideas se repetía en tiros a distancia que hasta ese entonces carecían de precisión.
El primer tiempo se cerró sin goles, negocio para los de Pezzolano ya que era un resultado que les daba la clasificación, pero que mantenía en suspenso para los segundo 45'.
El complemento se inició con la más clara de los de Belvedere, cuando un balón largo peinado por Ramírez, dejó solo a Federico Martínez que ingresó al área pero su remate se fue algo desviado.
Bahía no se rendía y trataba de obligar a una defensa que marcó a destajo, teniendo alguna posibilidad con un remate de Jakson e incluso reclamó un penal por supuesta falta de Martín Rivas sobre Ramíres.
En los minutos finales los negriazules trataron de cerrarse y contragolpear, mientras que la visita acumuló delanteros e iba con más ganas que claridad, observando como lentamente se les iba la clasificación.
Pero nada pudo hacer Bahía y Liverpool se dio el gustó de cerrar el 0-0 para que los hinchas pudieran festejar la clasificación a la segunda fase de la Sudamericana.