Sergio Rochet: Tapó un mano a mano clave a Raphinha en el primer tiempo y minutos más tarde tuvo otra intervención determinante rechazando un pase largo; estuvo seguro con los pies. Atajó el primer penal de Brasil y los desmoralizó.
Nahitan Nández: Tuvo un gran idea y vuelta, yendo al ataque constantemente. En defensa fue el encargado de perseguir a Rodrygo y protagonizó un gran cierre en la primera parte que salvó un gol. Estaba siendo el mejor hasta su expulsión a los 74’.
Ronald Araujo: Comenzó muy bien, sólido en los duelos defensivos, tantos al ras del suelo como aéreos, aunque falló algunos pases largos. A la media hora de juego salió con una dolencia muscular.
Maximiliano Olivera: En el primer tiempo jugó como zaguero y no lo hizo mal, pero su mejor rendimiento se dio en la segunda parte como lateral izquierdo. Subió mucho y generó ataques, mientras que defensivamente controló bien su sector.
Matías Viña: No fue su mejor partido, con algunos errores sobre todo en la entrega de balones. No se encontró con Maximiliano Araújo y el ataque celeste lo sintió. Salió en el entretiempo.
Manuel Ugarte: El león de Capurro, sobrio como siempre. Estuvo seguro en los pases y fue el ancla del equipo en la mitad de la cancha en faceta defensiva (anuló a Lucas Paquetá y terminó casi como zaguero), además de ser la primera opción en salida. Convirtió el último penal, simplemente cine.
Federico Valverde: Estuvo en todos lados de la cancha, marcando y generando juego. Mucho recorrido. En los últimos minutos jugó casi de 9 y se la bancó. Tomó la responsabilidad del primer penal y lo anotó.
Nicolás de la Cruz: Sacrificado como pocos. Corrió por toda la cancha, marcando, presionando y haciendo jugar a sus compañeros. En el complemento se cansó y salió.
Facundo Pellistri: Lo buscaron constantemente y encaró mucho, llegando hasta línea de fondo y generando varias ocasiones, algunas de ellas que terminaron en el área y otras en tiro de esquina.
Darwin Núñez: Corrió mucho y pidió todas, pero no pudo ser encontrado de gran manera, en parte gracias al gran rendimiento de los dos zagueros brasileños, que lo marcaron bien. Tuvo una ocasión clara que falló al cabecea.
Maximiliano Araújo: Lo estudiaron y se notó, al igual de que no estaba en su mejor forma física. No lo buscaron mucho y le costó entenderse con Viña, además de que no pudo ganar en el uno por uno. Levantó en el segundo tiempo, desgastándose más en defensa y bancando cada ataque, generando faltas.
Los que ingresaron
José María Giménez: A los 32’ por Ronald Araujo. No entró bien. La primera jugada perdió en carrera con Raphinha y luego estuvo errático en muchos pases. Por si fuera poco, no tuvo suerte en la definición por penales.
Sebastián Cáceres: A los 46’ por Matías Viña. En su caso, fue un gran ingreso, cortando varios pases en profundidad que intentaron los volantes brasileños y algunos pases largos.
Rodrigo Bentancur: A los por 66’ Nicolás de la Cruz. Manejó la pelota con criterio e intento generar juego pese a tener un hombre de menos. Encima anotó su penal.
Guillermo Varela: A los 77’ por Facundo Pellistri. Se bancó a Rodrygo y luego a Gabriel Martinelli. No pasó zozobras.
Giorgian de Arrascaeta: A los 77’ por Darwin Núñez. No pudo entrar demasiado en juego, pero tenía una misión en los penales y la cumplió.