Luego de que Peñarol anunciara a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y al Botafogo que jugaría sin público visitante la semifinal de vuelta de la Copa Libertadores el próximo miércoles “por razones de seguridad”, como consecuencia de un pedido del Ministerio del Interior, hubo respuesta del ente rector del fútbol continental.
En nota remitida al presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Ignacio Alonso, la Conmebol le recuerda que la notificación “debió ser emitida con al menos ocho días de anticipación a la fecha del encuentro” y que “aproximadamente 1.600 entradas ya han sido vendidas” a los visitantes, “quienes en su mayoría ya se han desplazado a Montevideo”.
“En otras ocasiones el Ministerio del Interior ha calificado los partidos de Peñarol de ‘alto riesgo’, habiendo el club tomado las medidas de seguridad y logísticas requeridas para llevar a cabo el partido en estricto cumplimiento a lo establecido en el Reglamento de la Competición”, añade la nota.
Por tal motivo, se les solicita al ministerio y a Peñarol que, antes de hoy a las 10 horas, “garanticen por escrito que se encuentran dadas las condiciones de seguridad necesarias para la realización del encuentro con la presencia de ambas parcialidades”. En caso contrario, la Conmebol podría establecer que el partido “se juegue sin público” o “trasladarlo a otro territorio”.
La respuesta de Peñarol
Los carboneros hicieron circular una nota a distintos medios firmada por su presidente, Ignacio Ruglio, en la que confirma que el lunes a las 23 horas el ministro del interior, Nicolás Martinelli, les informó que “volverá a responder a Conmebol de forma rotunda que no va a permitir al público visitante ingresar al Campeón del Siglo”.
El ministro argumenta tener “varias informaciones que inteligencia en el deporte le ha brindado”, por lo que “no es una decisión de Peñarol”, sino “del Ministerio, fundamentada en el clima de guerra que creó Botafogo en Río de Janeiro con su hinchada emboscando el punto de encuentro que fue una ‘zona liberada’ y lastimando familias con niños y mujeres en las inmediaciones de su estadio antes y después del partido” del miércoles pasado.
“Peñarol insiste a Conmebol que quiere jugar en su estadio y con su gente. No fueron Peñarol ni su gente los responsables de todo lo sucedido en Río. La gente de Peñarol solo se defendió de los ataques en toda la ciudad a todas las horas. Queremos jugar en nuestro estadio y con nuestra gente”, añade.
El Consejo Directivo de Peñarol se reunió vía Zoom este martes de mañana y ratificó, de forma conjunta, la intención de jugar con su hinchada. “Esa misma hinchada que fue víctima de zonas liberadas (hay material de videos) en Río y que no provocó este ambiente que se generó el miércoles pasado”, añade la misiva.
“Peñarol defenderá su derecho de jugar con su hinchada este partido de semifinales de Copa Libertadores. Ya sufrimos demasiados atropellos en Brasil para que también ahora nos obliguen a jugar de otra forma”, concluyó.
Los aurinegros expresaron a la Conmebol su deseo de disputar el partido con las dos parcialidades, pero aclarando que brindar las garantías para el normal desarrollo del espectáculo es algo que excede a ellos, por lo que acatan lo que ordena el Ministerio del Interior, que hoy a las 17 horas brindará una conferencia de prensa.