El partido en el Saroldi comenzó de forma intensa, con dos equipos que apostaron a mirar el arco rival y donde la marca en la mitad de la cancha era escasa.
A los 7' una mano de Sebastián Gorga en el área le dio la oportunidad de la apertura a los darseneros, pero el disparo penal de Juan Manuel Olivera lo tapó Ignacio De Arruabarrena volando sobre su palo derecho.
Un disparo de Matías Alonso volvió a exigir al golero bohemio que estaba muy atento para tapar una vez más y mantener su arco cerrado.
Y en la primera clara de Wanderers llegó el gol de la visita. Una salida rápida, encontró a Rodrigo Pastorino volcado a la derecha y este metió un pase medido a Nicolás Albarracín que definió con precisión para inflar las redes.
Este gol obligó aún más a los de Giordano a tomar protagonismo, algo que deberían de hacer con diez hombres luego que Luis Urruti se fuera expulsado por una falta fuerte sobre Adrián Colombino a los 33'.
Lo liquidó
En el complemento, River intentó, con un hombre menos, acercase al arco bohemio y con muchas ganas apretó a su rival en los primeros minutos, donde un tiro libre cercano de Alonso avisó de sus intenciones.
Pero poco duró este impulso, ya que los dirigidos por Espinel encontraron una catarata de goles, aprovechando la efectividad que le fue esquiva en otros cotejos.
Albarracín con tremendo remate a distancia, Castro finalizando dos corridas de contragolpe e incluso Bruno Méndez desde lejos ante la floja resistencia de Nicola Pérez, marcaron los cuatro goles con los que Wanderers cerró el cotejo por 5-0.