Rampla Juniors derrotó 2-0 a Progreso en el estadio Olímpico por la segunda fecha del torneo Clausura. Lautaro Rinaldi, en el primer tiempo, y Maximiliano Burruzo, en el cierre del partido, le dieron la victoria al Picapiedra, que tiene puntaje perfecto en el campeonato corto.
El inicio del encuentro era favorable a la visita, que buscaba ser protagonista, se adueñaba de la pelota y jugaba en campo contrario, aunque carecía de precisión en los metros finales de la cancha. El equipo local, en tanto, no tenía profundidad y tampoco se mostraba preciso durante los primeros minutos.
La apertura del marcador llegó a los 8' por intermedio del elenco dirigido Edgar Martínez: Gustavo Machado desbordó por derecha y colocó un centro al corazón del área que fue despejado para el lado contrario por Adrián Colombino; la pelota dio en el palo y derivó en el argentino Lautaro Rinaldi, quien se encargó de empujarla hacia el fondo de la red.
El trámite de la primera mitad continuó siendo chato y con escasas aproximaciones a los arcos. A los 43', Diego Rosa colocó un centro que se fue cerrando y complicó al arquero del Gaucho Nahuel Suárez, quien mandó la pelota al tiro de esquina. En la siguiente jugada, Matías Núñez asistió a Lautaro Centurión, que conectó un cabezazo que se perdió por encima del arco visitante.
El Picapiedra salió al complemento con la intención de aumentar la ventaja. A los 50', Maximiliano Burruzo probó suerte a través de un remate de media distancia que controló sin problema Suárez. La respuesta de la visita fue inmediata, por intermedio de una volea de Ignacio Lemmo que se perdió por encima del horizontal tras el centro de Nicolás Fernández.
En el minuto 52, Rampla volvió a llegar: Gustavo Machado habilitó a Matías Núñez, quien sacó un disparo que terminó en las manos de Suárez. Luego, a los 62', el conjunto locatario tuvo una nueva chance en los pies de Enrique Almeida, pero el arquero del Gaucho volvió a evitar el segundo gol picapiedra.
El Gaucho se quedó con un jugador menos a los 65 minutos por la expulsión de Mateu Aramburu tras una dura infracción a Almeida. En primera instancia, el árbitro principal, Hernán Heras, le mostró la tarjeta amarilla, pero luego cambió su decisión al ver la incidencia en el video arbitraje.
El elenco visitante se quedó sin fuerza ni armas para ir en busca del empate. El Picapiedra, en tanto, aguantó hasta el final y liquidó el partido a falta de dos minutos para que se cumpliera el tiempo reglamentario: precisamente a los 88', Lucas Bassadone colocó un centro desde la izquierda para Maximiliano Burruzo, quien conectó un cabezazo y sentenció el 2-0.