Fabián Estoyanoff, que ingresó en el complemento, fue clave en el triunfo por 2-1 ante Boston River en el Centenario, una victoria por la cual debió extremarse al máximo y que era impostergable.

El partido comenzó sin demasiada intensidad y con el local tratando de incomodar a la defensa rival con Bentancourt como encargado de meterse entre los zagueros para desequilibrar.

Así fue como sobre los 5' tuvo una ocasión clara tras recibir, girar y rematar, obligando a una buena tapada de Dawson para despejar al córner.

Nada demoró para tener otra que increíblemente se inicio con un saque de banda que mandaron al área, sacó Abascal a medias y el nueve pateó de primera pero sin precisión.

Peñarol no la pasaba bien, la zona de volantes no hacía pie en la contención y el protagonismo era del Sastre que acumulaba acciones ofensivas que no podía concretar. 

Gargano no podía armar los circuitos colectivos, De Los Santos no aparecía y Torres buscaba la individual, optando los mirasoles por probar con remates de media distancia que encontraron a Falcón bien ubicado.

Los rojiverdes eran superiores y hacían méritos para llegar a la apertura, pero Rigoleto o Larrosa no pudieron dar el puntillazo final a lo que generaron.

En los de Larriera, Trindade, muy voluntarioso, cada vez que tenía el balón frenaba cualquier ataque en velocidad, ya que su necesidad de entregar el balón seguro y corto terminaba siendo contraproducente para su escuadra.

Los minutos transcurrieron y recién sobre los 40' apareció la primera ocasión clara para el visitante, con Piquerez desbordando por izquierda, bajando la pelota de cabeza Álvarez Martínez para Trindade cuyo remate fue repelido por el golero y en el rebote Britos trató de ajusticiar, pero un defensa despejó al córner.

Nada cambió el resultado cerrado con que se fueron al descanso con la obligación para el entrenador mirasol de buscar en el banco variantes para cambiar la cara de un pobre rendimiento.

Los goles

Para el complemento Larriera no dudó y colocó tres cambios de movida, ingresando Formiliano, Álvarez Wallace y Estoyanoff por Abascal, Gargano y De Los Santos. Tejera también tuvo que colocar a Winston Fernández por el lesionado Olaizola. 

Y vaya si le dio resultado el movimiento al carbonero, ya que el "Lolo" a los cinco minutos de ingresado aprovechó un despeje de Fernández para sacar un zapatazo espectacular que se metió por el palo izquierdo de Falcón para el 1-0 parcial.

Seis minutos después llegó el segundo que amplió diferencias, tras una buena combinación de Torres y Piquerez que el lateral mandó al área y Agustín Álvarez Martínez tocó anticipando para el 2-0.

Una distancia que daba tranquilidad a la visita, que trató de controlar y ampliar para no pasar zozobras, algo que pasó tras una indiscutible pena máxima.

Rigoleto ingresó al área y Álvarez Wallace se lo llevó puesto, no dudando González en pitar el penal que Rubén Bentancourt no falló para el 2-1 que dejó a tiro a Boston River.

Con el partido abierto, Tejera apostó a refrescar el equipo y plantear una presión alta sobre la salida de su adversario, algo que estuvo a punto de darle resultado.

Un balón cruzado de Rigoleto que no llegó a desviar Bentancourt y un disparo desde lejos de Alberti que obligó a Dawson a volar para sacar al córner mostraron que los locales iban a vender cara la derrota.

Los carboneros en tanto, apostaron a ingresos como el de Vadócz, para pararse 4-5-1 y con eso cerrar el juego y la obtención de los tres puntos que tanto necesitaba.

El pitazo final selló el triunfo de Peñarol en el Centenario, tres puntos importantes para soñar con el Clausura y no perder pisada en la Anual, un objetivo algo más lejano.