Peñarol consiguió una trabajosa y merecida victoria frente a Boston River en Rivera para quedar en lo más alto de la tabla del Clausura y a cuatro de Nacional en la Anual. Hizo méritos para ponerse en ventaja antes y hasta mereció una diferencia más amplia, pero pagó caro la falta de eficacia en los metros finales.
El equipo de Diego López hizo un muy buen primer tiempo en materia ofensiva, pero le faltó embocarle al arco. Desde las bandas generó las primeras aproximaciones y a partir de los pies de Cristian Rodríguez las llegadas más claras, pero los delanteros no estuvieron finos en la definición.
Un zurdazo de Lucas Viatri desviado a los 13' y un par de situaciones muy claras en los pies de Gabriel Fernández antes de la media hora fueron lo más peligroso del conjunto carbonero, que no pasó demasiadas zozobras atrás antes del descanso. No obstante, la velocidad de Bruno Foliados lo complicó por momentos.
Avisó Boston River a los 9' del complemento con un derechazo alto de Federico Gallego, y dos minutos después cayó el 1-0 mirasol. Agustín Canobbio incursionó por derecha, buscó a Viatri en el área y el argentino descargó notablemente al medio para la aparición del Toro Fernández, que facturó con derechazo bajo.
Alejandro Apud movió fichas y rápidamente obtuvo réditos. Wiston Fernández y Franco Acosta sustituyeron a Gallego y Robert Flores a los 61', y a los 66' cayó el inmerecido 1-1. Formiliano despejó a medias un mal remate de Pablo Álvarez y en el rebote Miguel Amado marcó un golazo de zurda desde el borde del área.
Peñarol siguió yendo al frente, a esa altura con Estoyanoff en lugar de Lores, y de los pies del Lolo nació el 2-1 a los 75'. El 11 tiró un centro desde la derecha, Carlos Valdez le dio con el codo en el rostro a Gabriel Fernández y Ferreyra pitó penal. El Cebolla Rodríguez lo capitalizó con un potente zurdazo que rozó Falcón.
Luego intentó defenderse con la pelota el elenco carbonero, más allá de que su rival le llegó y tuvo alguna aproximación. En la más peligrosa, que fue a los 86', Diego Coelho le erró al arco mediante un cabezazo muy claro a la salida de un tiro libre ejecutado por Foliados desde la derecha.
Sin sobrarle nada pero con los merecimientos suficientes, Peñarol salió airoso de su visita a Rivera y sigue a tiro en la lucha por el título.