Peñarol derrotó con autoridad por 4-0 a Rampla Juniors en el Campeón del Siglo, tres puntos que lo dejan como líder del Clausura, pero además lo separan ocho puntos de su más cercano perseguidor en la Anual, Nacional, que este domingo enfrenta a Wanderers.

El partido comenzó con los aurinegros tratando de tomar las riendas del partido y utilizar las bandas para generar desequilibrio ante un visitante ordenado y bien parado en cancha.

Un tiro libre lejano de Leonardo Fernández que se fue alto fue el primer intento de acercamiento de un equipo que manejaba la pelota pero sin profundidad.

Pasado el cuarto de hora un desborde y centro de Báez, que luego fue peinado por Silvera, terminó en un tiro de Cabrera que no encontró arco. Más tarde, Darias fue el que probó con cierta peligrosidad, en un conjunto que acumulaba acciones en pos del gol.

El buen trabajo en zona de volantes de Adoryan y Núñez, más alguna corrida de Burruzo mostraban lo mejor de un Picapiedra que jugaba sencillo y era práctico.

En los carboneros aparecían poco los extremos y Silvera estaba muy solo en la pelea ante los zagueros, algo que hizo que esa manutención del esférico no tuviera ningún beneficio en lo práctico, mientras se diluía la primera etapa.

Pero todo lo que falló hasta ese momento funcionó a la perfección a los 44'. Un pase filtrado de Damián García a espaldas del lateral derecho encontró la corrida del Cangrejo Cabrera que se escapó, la puso al medio para Silvera que apareció solo para controlar y definir ante la salida de Samurio para el 1-0.

Barrandeguy protestó airadamente una falta del nueve para ganar la posición que el árbitro y el VAR desestimaron, lo que se cerró los 45' con la ventaja mínima en favor del local.

Se floreó

En complemento comenzó con cambios en los dos: Gastón Ramírez vio acción por Eduardo Darias, mientras que Nicolás Mezquida hizo lo propio por Lautaro Rinaldi.

Con el resultado en contra, el conjunto de Edgar Martínez trató de adelantarse y crear opciones que complicaran a la última línea contrincante, principalmente con pases en velocidad.

Y a loas 57' las alarmas se encendieron cuando Leonardo Fernández pidió atención médica tras una falta de Rosa, algo que preocupó a los hinchas pensando en el duelo del jueves ante Flamengo por Libertadores. El volante sintió el contacto, pero se recuperó y volvió.

Es más, sobre los 60' envío un centro al área que conectó Ramírez de primera y reventó el palo, en una situación muy cercana al segundo tanto.

Lucas Hernández y Leonardo Sequeira a la cancha por Maximiliano Olivera y Javier Cabrera, dos nuevas variantes realizadas por Diego Aguirre.

El segundo gol que pareció sentenciar el partido llegó a los 69'. Un resbalón de Barrandeguy terminó con los mirasoles recuperando la pelota, un estupendo pase filtrado de Leo Fernández para Maxi Silvera que encaró y ante la salida de Samurio se la dio a Jaime Báez quién con arco vació toco al fondo de las redes.

2-0 y la Fiera que siguió renovando el once en cancha, ahora saliendo el nueve, que fue la gran figura del trámite, para el ingreso de Facundo Batista.

Hernández, al igual que en el partido pasado, sobre los 75' se mandó a posición de nueve y trató de picar una pelota por sobre Adoryan que la tocó con la mano. Tejera dejó seguir, pero luego a instancia del VAR revisó la acción y pitó el penal. Entonces, a los 79', Leonardo Fernández aprovechó la pena máxima, la cruzó y colocó el 3-0.

Aguirre repitió la acción anterior y, tras su festejo, optó por sacarlo de la cancha y darle minutos a otras de las altas de este semestre, Felipe Avenatti.

Si algo faltaba para que la fiesta fuera completa era la llegada del cuarto. Un desborde y centro de Lucas Hernández por izquierda, llegó perfecto para el cabezazo de Facundo Batista que marcó el 4-0 que puso cifras definitiva al duelo.