Peñarol sumó una necesaria y trabajosa victoria en su visita a Liverpool para seguir a dos puntos de Nacional en el Clausura y a siete en la Tabla Anual. Sin brillar, hizo buenos los cuatro cambios que introdujo su entrenador respecto al equipo que cayó ante Atlético Paranaense e inició el camino de la recuperación tras el duro golpe de la Copa Sudamericana.
Los negriazules sorprendieron con su ritmo en el comienzo y buscaron complicar a velocidad, pero perdieron los mano a mano en el área, donde además casi no ganaron una sola pelota aérea. Más allá de las intenciones y el buen manejo de Figueredo en el eje central, de a poco se fue afianzando el elenco de Diego López atrás y a los 20’ abrió el score.
Un par de minutos después de un aviso de Canobbio que Bava mandó al córner, cayó el 1-0 en una jugada rápida. Viatri pivoteó desde el piso, Lucas Hernández abrió para Lores y éste de primera llegando por izquierda metió un centro bajo que Gabriel Fernández mandó a la red definiendo de derecha y a contrapierna del arquero.
Posteriormente creció tímidamente Liverpool con Figueredo como jugador más peligroso. En la más clara del elenco de Paulo Pezzolano, el número 13 invadió de derecha al medio y exigió a Dawson con un zurdazo bajo y potente que el arquero mirasol contuvo sin dar rebote.
Dawson volvió a lucirse a los 48’, cuando tapó un remate de Federico Martínez desde afuera del área. En la recarga contragolpeó Peñarol y reclamó, con razón, un claro penal de Martín González sobre Gabriel Fernández que no advirtió Andrés Cunha a pocos metros de la acción.
A los 54’ y tras un rebote en Martín Rivas hubo un derechazo de Viatri que dio en el vertical. Pudo haber liquidado el pleito el conjunto aurinegro en esa llegada, pero al no hacerlo comenzó a sufrir ante los embates constantes de un rival que pasó a controlar cancha y pelota. Por eso, Diego López sacó a Canobbio y puso a Freitas para reforzar la marca en el medio.
No obstante, a poco del ingreso de Freitas llegó el empate de Liverpool. Cristian Souza llegó a fondo y muy suelto por izquierda, metió un centro atrás y entró de frente Federico Martínez para convertir con un derechazo de primera. Si bien el remate salió mordido, se coló contra un caño con buena dirección.
Era el peor momento de Peñarol en la tarde, pero sin merecerlo volvió a adelantarse en el tanteador a los 76’. En una salida rápida, Viatri descargó notablemente para Gabriel Fernández y lo puso de cara al gol. Lanzado en carrera, el Toro encaró a Bava y definió notablemente con la cara externa del botín derecho para poner el 1-2 en Belvedere.
Cinco minutos después cayó el 1-3 para sentenciar el encuentro. Lucas Hernández ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda y Cristian Rodríguez anotó con un perfecto cabezazo contra un caño que hizo estéril la volada de Bava.
Ya en el tramo final descontó Liverpool. Un cabezazo de Clementino González dio en el brazo de Gonzalo Freitas y Cunha, acertadamente, marcó penal. Juan Ignacio Ramírez lo transformó en gol pero no hubo tiempo para el empate. Luego fue expulsado Santiago Viera y a los 96’ el Toro Fernández abrochó su hattrick aprovechando una asistencia perfecta de Maxi Rodríguez.