El partido comenzó con dos equipos intentando arrimarse al área rival, con poco pasaje por zona de volantes y buscando por las bandas para generar desequilibrio.
Una acción de Canobbio por izquierda que terminó con un pase al centro que Matías De Los Santos no pudo rematar fue la primera clara de un juego entreverado y con muchas pérdidas en los pases por parte de los dos.
Los franjeados tenían más el balón que los mirasoles pero carecían de peso en el área para incomodar a su rival, el cual con pocas ideas llegó algo más, con ganas y sin mucho juego asociado.
Xisco, cuerpeando ante los defensas, ganó una pelota que terminó en un remate desviado, en lo poco destacable de un partido de pocas emociones y situaciones.
Un remate de media distancia de Matías Jones que se fue cerca del palo izquierdo de Dawson fue la más clara de los dirigidos en la ocasión por Bruno Piano, que no podían incomodar a la defensa carbonera.
De Los Santos era de los más claros en los de López y con sus intentos desde lejos obligó a Cristóforo a estar en estado de alerta, aunque aún sin la precisión necesaria para obligarlo a entrar en acción.
La salida del Cebolla Rodríguez por una dolencia física a los 30' y el ingreso de Guzmán Pereira en su lugar generó el comentario de los hinchas en la tribuna que veían como transcurrían los minutos y el ansiado gol no llegaba.
Los primeros 45' se fueron con un corner que cabeceó Pantaleone primero, Grosmüller después y se fue cerca, además de una corrida con Pellistri que no pudo asistir a Xisco, sellando el 0-0 en el cotejo.
Los goles
El complemento comenzó con Peñarol decidido a buscar el gol que le diera la ventaja ante un rival que trató de defenderse y no lograba generar en ataque.
Pellistri por derecha se hacía incontenible, pero el mirasol seguía fallando a la hora del puntillazo final, como una clara de Canobbio que en el área colocó un remate que tapó el golero local.
Pero el volante tendría su revancha a los 53' cuando un una pelota que pateó Guzmán Rodríguez en el área dio en la mano extendida de Mauricio Victorino y Matonte no dudó para pitar penal.
Canobbio pidió la volada, remató al palo izquierdo de Cristóforo que llegó a manotearla pero no pudo evitar que entrara para el 1-0 parcial.
Eso dio tranquilidad a los visitantes y terminó de desordenar a los franjeados que acumularon hombres de ofensiva pero no tenían ideas para crear alguna chance clara.
El segundo carbonero llegó tras una jugada que inicio Pellistri, continuó De Los Santos que metió un centro estupendo a la cabeza de Xisco y el español, con su especialidad, no falló para el 2-0.
Este golpe terminó de encaminar el trámite para los visitantes, ya que las intenciones danubianas se diluían una y otra vez cuando se acercaban al área y solo un disparo de Mauricio Victorino preocupó a Dawson.
El pitazo del árbitro determinó el cierre de un cotejo que da tranquilidad a Peñarol, que aprovechó la caída del líder, Nacional, descontó tres puntos para quedar a cuatro en el Clausura y demuestra una reacción para seguir peleando.