Nacional le ganó a Wanderers 2-0 a domicilio por la tercera fecha del Torneo Clausura, bajó a su rival de la punta y quedó segundo a dos unidades de Danubio. Además, se mantiene a cinco de Peñarol en la Tabla Anual y mostró una versión muy sólida desde el juego ante un rival que venía primero y con cinco victorias consecutivas.
Los bohemios tuvieron la primera situación clara de la etapa inicial a los 2’, cuando Tabaré Viudez armó una gran pared en el área con Kevin Rolón y llegó al fondo por izquierda para dejar el tanto servido a Nicolás Royón, pero el centrodelantero le erró al arco pese a definir solo en el área chica. Después de esa llegada, fue todo del Bolso en la primera parte.
A los 4’ ya ganaba el conjunto de Martín Lasarte. Diego Polenta anticipó a Royón y asistió en profundidad a Nicolás López, quien picó habilitado y ni siquiera necesitó controlar la pelota para convertir. El Diente dejó correr el balón y cuando salió Jhony da Silva remató de zurda, con sutileza y al ángulo.
Demasiadas ocasiones malogradas
Dos minutos más tarde Ruben Bentancourt facturó capitalizando un resbalón de Da Silva, pero se anuló la conquista con fina posición adelantada. Fue la primera de muchas ocasiones en las que el Bolso acarició el segundo tanto en una primera mitad marcada por su neto dominio.
Antonio Galeano estuvo cerca al arrojarse al piso para definir a los 16’, luego de un rebote en una jugada de pelota quieta, y un minuto después hubo una doble chance. Primero Diego Zabala dejó al Diente López de cara con Da Silva, quien contuvo el remate, y en el rebote disparó Galeano desde afuera del área y despejó Mario Risso en la línea.
Bentancourt tuvo otra muy clara a los 29’, cuando combinó con Zabala y quedó mano a mano con el arquero bohemio, pero definió muy mal de zurda. Fue lo último del salteño en plenitud, ya que a los 32’, producto de un choque casual con Emiliano García, sufrió un corte en el pómulo izquierdo por el impacto de un tapón del zaguero sobre el rostro, lo que también le generó pérdida de sangre por las fosas nasales.
El dominio dejó de ser tan claro después de la primera media hora de juego. Wanderers se plantó más adelante en el terreno, equiparó la lucha por la posesión en el mediocampo y se sacó de encima al conjunto de Martín Lasarte, pero lejos estuvo de inquietar a Luis Mejía, quien casi no tuvo participación antes del entretiempo.
Más de lo mismo en el complemento, hasta que lo liquidó
En la segunda parte, el trámite no cambió pese a los cambios de Antonio Pacheco en filas bohemias. Nacional, con Christian Oliva y Lucas Sanabria prevaleciendo en el mediocampo, siguió dominando las acciones, pero sin concretar en la red. Pudo haberlo pagado en momentos puntuales en los que su rival se aproximó, pero fue demasiado tibio.
Wanderers solo llevó peligro real sobre el arco de Mejía a los 69’, cuando en un centro al área aparecieron solos Paulo Lima y Nicolás Fonseca para definir pero terminaron molestándose entre ellos. Apenas un minuto después cayó el 0-2. Emiliano Velázquez habilitó en largo al magullado Bentancourt, quien picó a fondo y cedió el tanto a Gastón González, que empujó el balón a la red apenas un par de minutos después de haber entrado por Diego Zabala.
Solo faltaba que el Bolso liquidara un partido que mereció ganar por más. Los cambios de Pacheco ya no pudieron torcer el rumbo de un trámite casi perfecto para los tricolores, en el que la única preocupación fue la salida de Polenta algo sentido a los 81’.
A los 83’ facturó Bentancourt tras un desborde a fondo de Guillermo López por derecha, pero se invalidó la conquista por posición adelantada del juvenil. Luego hubo más contragolpes malogrados por los albos, que merecieron una ventaja mucho más amplia en el tanteador.