Ante un equipo como Juventud que se dedicó a defender con mucha gente en la última zona, Nacional se mostró inexpresivo una vez más y logró tan solo un empate como local que le impidió superar a Peñarol en ambas tablas, oportunidad que deja pasar una semana más.

Que el dominio iba a corresponder al bolso se hizo evidente desde los primeros minutos. La posesión del balón y la disposición para jugar en territorio adversario era del equipo tricolor, que desde el arranque mostró sus intenciones de ser protagonista.

Enfrente Juventud, plantó dos líneas de cuatro delante de Fabián FaCarini olvidándose prácticamente del arco de Conde. El propósito de los pedrenses era claro: llevarse un punto del Parque Central.

Así se desarrolló la primera parte, en donde estaba todo muy claro, Nacional tenía la llave para hacer suyo el partido pero nunca supo encontrarle la vuelta. Pobre producción tricolor, que tras el ímpetu inicial se fue deshilachando hasta el final de la primera mitad, donde el bajón individual y colectivo era enorme.

Se rescatan un par de intentos por arriba en donde Sebastián Fernández exigió una gran tapada de Carini, y más tarde otra no tan peligrosa de Ramírez. Luego un disparo de lejos de Fucile que pasó muy cerca del palo derecho.

Sin ideas, sin intelecto de medio campo en adelante, solo la velocidad de Barcia quedaba como elemento desequilibrante para el elenco de Gustavo Munúa, que no supo cómo entrarle a la defensa visitante.

Para el segundo tiempo Nacional cambió al menos la actitud, más allá de que seguía careciendo de un funcionamiento adecuado en ataque. La dupla Porras-Romero, habitual eje del juego tricolor, no anduvo para nada. Nico López se tiraba atrás para elaborar pero el equipo perdía peso en el área. Solo Barcia y los intentos de Sebastián Fernández, seguían siendo lo mejor del tricolor.

Fue justamente un cabezazo de Fernández la chance de mayor peligro sobre el arco de Juventud, ya que su disparo dio en el palo luego de que Carini la rozara. Los minutos pasaban y el desgaste en la visita se hacía notorio, cometiendo además varias infracciones en las cercanías del área pero no encontró jamás un ejecutante. Todos los que probaron, Polenta, Ferández, López, Porras, González, dejaron la pelota en la barrera.

Por si fuera poco lo irresoluto que era en ofensiva Nacional, cometió un error en defensa que le costó caro. Cabaco la pedió ante Facundo Barcelo y el ex Liverpool que se fue de cara a Conde para convertir el 1-0 a los 26' del complemento.

En el equipo tricolor ingresó el brasileño Leo Gamalho, debutando con correcta participación cuando ya el conjunto de Munúa era una avalancha sobre el área de Juventud, sin claridad pero golpeando una y otra vez sobre la defensa visitante.

En uno de los tantos centros contra el área llegó el tanto del empate. El envío que nadie logró cabecear y la pelota suelta en el área que la encontró Ignacio González para rematar y poner el justificado 1-1 a 9 minutos del final.

Nacional continuó buscando, mostrando las mismas carencias que durante todo el encuentro. Juventud consiguió su cometido, mientras que para el local fue dejar pasar una nueva oportunidad de superar a Peñarol en ambas tablas.

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