Liverpool remontó el partido y derrotó 2-1 a Progreso en el estadio Belvedere por la décima fecha del torneo Clausura, en el primer triunfo de Joaquín Papa como director técnico negriazul.
El inicio del partido fue favorable al equipo local, que al minuto de juego generó la primera situación de gol cuando Facundo Perdomo trepó por el sector derecho y colocó un centro desde la derecha que Hugo Quintana conectó de cabeza, pero la pelota se fue afuera.
El conjunto negriazul continuó insistiendo y tuvo a los 8' una nueva situación en los pies de Kevin Amaro, quien mandó su remate por encima del travesaño del elenco gaucho.
Cuando transcurrían 15 minutos de juego, la visita pegó fuerte tras un contragolpe letal. En su primera llegada al arco rival en el partido, Progreso abrió el marcador por intermedio de Mauro Martín, quien recibió solo dentro del área, enganchó para su pierna zurda e infló la red.
El gol llevó al entrenador Joaquín Papa adelantar líneas en el Negriazul, que respondió en el minuto 27 con un disparo de Renzo Machado que se perdió afuera.
Poco a poco, el conjunto locatario hacía méritos para encontrar el empate, incluso con otro intento del propio Machado y más llegadas. Hasta que, en tiempo adicional previo al cierre del primer tiempo, Agustín Cayetano encontró con un centro a Diego García, quien conectó un cabezazo, convirtió el 1-1 tras el contragolpe y le gritó el gol a la hinchada, que le respondió con abucheos y manifestando enojo.
En el complemento, el conjunto negriazul bajó su rival y careció de dinámica e intensidad. Sin embargo, no fue complicado por un elenco de Carlos Canobbio que estuvo muy impreciso en los metros finales.
Cuando transcurrían 74 minutos, Perdomo colocó un centro y la pelota dio en la mano del defensor de Progreso Martín Marta dentro del área, por lo que el árbitro Andrés Matonte fue llamado por el VAR, revisó la incidencia y cobró penal. Desde ahí llegó el gol de García, que le pidió disculpas al público por su festejo en la primera anotación.
Si parecía complicado de empatar el partido para el Gaucho, Nahuel Suárez lo hizo aún más difícil. El arquero visitante dejó con diez a su equipo tras salir del área y tocar la pelota con la mano, buscando cortar el gol negriazul luego de quedar a mitad de camino.