El partido comenzó con Nacional tratando de buscar a Tabaré Viudez en ofensiva como carta de desequilibrio, mientras que Abdiel Arroyo era el más movedizo de los franjeados, obligando a cortar con faltas sus progresiones, costando esto una rápida amarilla a Arismendi.

La primera de peligro llegó a los 10' cuando una corrida de Alfonso Espino por derecha terminó en un centro al área que debió sacar el "Pumita" Rodríguez ante la salida con dudas del golero Cristóforo.

El partido no pasaba por las áreas, se marcaba mucho más de lo que se creaba y las ocasiones de gol escaseaban, estando los delanteros ausentes de las acciones y por ende el movimiento se tornaba monótono y repetitivo.

A los 37' Viudez tuvo un momento de inspiración y metió un pase en cortada que recibió Sebastián Fernández para definir de primera, pero el golero franjeado con los pies tapó la chance de la visita.

Con poco los de Lasarte eran superiores y con un centro de "Papelito" desde la derecha que cabeceó Silveira volvió a tener otro intento de marcar la apertura.

Llegaron los goles

El complemento comenzó con la visita un poco más dispuesta a ofender a su rival y para ello Viudez volvió a ser el estandarte, incluso teniendo una chance clara que Cristóforo, bien parado, logró despejar.

Pero fue el propio Viudez el encargado de romper la paridad a los 54', con una jugada propia de su clase, combinando con Arismendi, quien devolvió un pase justo y éste con cara externa del pie definió ante la salida desesperada del arquero para anotar el 1-0 justificado a esa altura del juego.

Abdiel Arroyo en un par de ocasiones y sabedores los locales de que debían arriesgar mucho más, hicieron trabajar a Conde, algo inédito hasta ese momento, pero que les daría rédito más tarde.

Pero así como el gol de Nacional fue a consecuencia de una inspiración personal, el de Danubio fue igual, tras una magistral jugada de David Terans que recibió el balón al borde del área, encaró, dejó atrás a Rogel y Fucile, y remató ante el cierre desesperado de Polenta para el 1-1 parcial.

De allí en más hubo alguna intentona más para ambos lados, pero la creatividad que terminó derivando en los goles se apagó con el empate y el reparto de puntos se selló con el pitazo de Ostojich.