Clausura: Danubio se impuso por 2-0 a Rampla Juniors en el Olímpico y sigue soñando

Danubio derrotó 2-0 a Rampla Juniors en el estadio Olímpico por la fecha 11 del Clausura y sigue soñando, ya que llegó a 22 puntos, cuatro menos que el líder. Además, el Franjeado está quinto en la Anual con 50 puntos, a dos de los puestos de clasificación a Copa Libertadores. El Picapiedra, en tanto, se complicó en la tabla del descenso, en la que tiene 1.151 unidades.

La primera ocasión peligosa la tuvo Danubio a los 4 minutos, cuando Emiliano Ancheta remató de primera al borde del área un balón que había sido rechazado al meido por la defensa y pasó apenas pegado al palo. A los 17' llegó al área rival Rampla, con un mano a mano de Diego Rosa con Mauro Goicoechea que ganó el arquero danubiano.

Las llegadas eran pocas, pero a los 23' el Franjeado recuperó la pelota en la mitad de la cancha y Santiago Romero colocó un gran pase profundo para Cristhian Tizón, quien le ganó en velocidad a su marcador y definió cruzado para vencer al golero picapiedra y abrir el marcador. Dos minutos más tarde el Colo Romero tuvo el segundo con un disparo lejano que se fue apenas alto.

En el inicio de la segunda parte, a los 55', Danubio salió de contragolpe en un tiro de esquina a favor del equipo locatario; Sebastián Fernández cruzó para Lucas Sanseviero, que cedió para Tizón y este le devolvió la pelota. El extremo se acomodó hacia el medio y sacó un gran disparo al segundo palo, anotando un golazo. Sin embargo, fue anulado vía VAR por un codazo de Tizón a Federico Barrandeguy en el inicio de la jugada.

Más tarde, a los 63', el que encontró el gol pero tampoco subió al marcador, esta vez por fuera de juego, fue Rampla. Goicoechea le atajó un potenta remate a Lucas Bassadone y el rebote lo capturó el argentino Lautaro Rinaldi, quien definió de rabona, pero se encontraba adelantado. Luego, a los 67', Matías Pólvera cabeceó en el segundo palo, pero no tuvo dirección.

Los locales siguieron atacando en busca del empate y estuvieron cerca de conseguirlo a los 69', cuando Rnaldi cabeceó un gran centro despachado por Barrandeguy que tapó de forma espectacular el golero danubiano. Hasta que, a los 87', Sanseviero centró y apareció Papelito Fernández, que mandó a guardar la pelota y puso el 2-0 definitivo.