Durante la primera parte no pasó nada. Ninguno de los dos equipos llevó a cabo un disparo al arco. Algo para destacar: Wanderers tuvo dos tiros de esquina. Después no ocurrió mucho más. El complemento fue muy distinto.
Ni bien comenzó el Bohemio tuvo dos situaciones peligrosas. La primera fue un cabezazo de Hernán Rivero que pasó apenas por encima del travesaño del golero Alberto Eiraldi, mientras que la otra fue el tanto de Leonardo Pais a los 48'.
El Auriverde se fue con todo en busca de la igualdad. Después de una buena jugada colectiva, Juan Manuel Ortiz desbordó por el sector derecho, lanzó un centro rastreo y Maximiliano Silvera definió de taco para poner el 1-1 a los 54'. Un verdadero golazo.
Los dos equipos tuvieron situaciones para romper la paridad en el marcador. Pero cerca del final fue Cerrito el que pegó. Tras un tiro de esquina, Silvera apareció en el segundo palo para empujar la pelota adentro del arco y establecer el 2-1 a los 82'.
El Bohemio llegó al 2-2 final por medio de un penal de Bruno Méndez a los 90+3'. El Auriverde desaprovechó la chance de sumar tres puntos claves en su lucha por meterse en puestos clasificatorios a la Copa Sudamericana. Wanderers llegó a los 31 puntos en la anual y quedó dos del último cuadro que se está clasificando a la Sudamericana, Fénix.