El partido comenzó con Boston River tratando de tomar el protagonismo y ofender a los locales, aunque aún sin poder hacer diferencia a la hora de llegar al área rival.

Racing, sin desesperarse, lentamente se fue acomodando al trámite, marcando mejor en zona de volantes y tratando de utilizar las bandas para generar desequilibrio.

Un disparo de Barrios fue la primera intentona con cierto peligro en un cotejo donde los dos primero trataban de cerrar caminos a su rival para después pensar en "golpear".

El partido era intenso pero de escasas ideas en el último pase que lograra crear una ventaja para llegar con opciones favorables ante los goleros, que no pasaban mucho trabajo.

Un cabezazo de Nicolás Sosa tras centro desde la izquierda movió un poco la monotonía de un trámite donde Boston River a esa altura no encontraba soluciones, pasando desapercibidos Coelho y Facundo Rodríguez.

El pitazo de Ferreyra mandó a los equipos a los vestuarios con un justificado empate sin goles, que dejó gusto a muy poco. 

Dormidos

En el complemento la "Escuelita" mostró mucho de lo mejor de su actuación, principalmente en los primeros quince, donde dominó y tuvo tres chances muy claras de conseguir la apertura.

Dos remates de Liber Quiñones y un cabezazo de Nicolás Sosa hicieron ilusionar a los locales con el ansiado gol, por el cual hacían méritos.

Pero allí fue cuando sorprendió el equipo de Martín García, que encontró el gol tras una desatención defensiva increíble para un partido de esta importancia. Un pelotazo largo que ganó Diego Coelho terminó en un remate cruzado que venció a Melián e infló las redes para el 1-0.

Un tanto que además se vio potenciado por la expulsión de Liber Mirabaje en los albiverdes por dos amarilla que dejó al local con diez hombres para ir a buscar el empate.

Los de Favaro se tiraron con todo al ataque, carentes de ideas y con un contricante que se defendió muy bien, cerrando espacios y no dejando posibilidades a su rival.

Los de Sayago no sabían como quebrar esa barrera y los nervios iban en aumento, más cuando se quedó con nueve por la expulsión de Agustín Oliveros.

Poco pudo hacer y el final del juego sentenció la victoria de Boston River por 1-0, que en el mano a mano por la permanencia ahora depende de si mismo. Racing deberá ganar los partidos que le quedan y que el "sastre" caiga derrotado.