Peñarol venció 2-0 a Nacional en el Campeón del Siglo por la novena fecha del torneo Apertura, con goles de Kevin Méndez e Ignacio Laquintana, en un duelo donde fue muy superior y le dio tres puntos para ser líderes del torneo Apertura con cinco de ventaja sobre su tradicional rival.
El partido comenzó con los locales tratando de tomar la iniciativa y buscar sobre la banda derecha a Ignacio Laquintana sobre la marca de Cándido para tratar de desequilibrar.
Fueron diez minutos de cortes constantes y presión sobre Sebastián Rodríguez con un Yonathan Rodríguez que se encargó de no darle espacios para crear y mucho menos asistir.
Federico Martínez trataba de ganar la cuereada en la banda con su velocidad, en un tramo de pocas llegadas claras pero de gran intensidad.
A los 11' apareció una buena posibilidad del mirasol con un pase que Laquintana para un Arezo desmarcado que probó de media distancia, rebotó y se fue muy cerca. De ese córner al área, el que también intentó fue Homenchenko pero sin darle dirección.
Los albos no encontraban la pelota y utilizaban poco a Zabala por izquierda, con Pereiro controlado y Fagúndez siendo poco habilitado.
Un remate de Arezo que se fue cerca fue el anticipo de un encontronazo entre Pereiro y Coelho que generó empujones entre los jugadores en cancha. Instantes después una plancha del propio delantero le costó la amarilla.
Lo cierto es que a esa altura los locales tenían el contralor de las acciones y lograban pautar lo que generaba Laquintana por derecha con Méndez en la izquierda.
Un tiro libre de Arezo a la barrera y otro de Sebastián Rodríguez que atrapó Rochet, fueron nuevas intentonas de un equipo que quería la apertura.
El mediocampo visitante no lograba generar ya que Pereiro la tocaba poco y los laterales estaban más enfocados en marcar que en desdoblarse. Un cabezazo de Montiel que se fue lejos tras un córner, fue su primera clara a los 38'.
Y más tarde fue un remate de Tonathan Rodríguez que mostró un leve crecimiento de los albos en esa recta final, con Diego Rodríguez más activo y Zabala queriendo pesar.
Nada pasó hasta el cierre de esa primera etapa que se cerró con una igualdad sin goles y los jugadores rumbo al descanso para ajustar piezas.
Goles son amores
Valentín Rodríguez, sentido, dejó la cancha en el complemento para el ingreso de Lucas Hernández, mientras que en los albos se mantuvieron los mismos once.
Un remate de Cristóforo volvió a hacer trabajar a Rochet, en un reinicio de menor intensidad, pero con las misma características de lo anterior.
Los tricolores encontraron una ocasión a los 50' tras un tiro de esquina que peleó Fagúndez en el área y terminó en Pereiro que giró y remató pero sin la dirección deseada.
Y la más calra fue 3' con una acción personal del propio Pereiro que se mandó, dejó gente por el camino, asistió a Fagúndez que vio solo a Federico Martínez para el remate y su intento terminó dando en el palo izquierdo del palo de Cardozo.
La respuesta llegó con un pase de Méndez para el zapatazo de Sebastián Rodríguez que hizo ilusionar a más de uno, en un duelo mucho más parejo a esa altura y en el que Gutiérrez apostó a variantes.
Gigliotti, Trezza y Ginella por Fagúndez, Pereiro y Zabala fueron las modificaciones del entrenador para apostar a ganador en los 25' finales de acción.
Arias no se quedó atrás y optó por Abel Hernández en lugar del amonestado Homenchenko, con un reloj que avanzaba con el resultado intacto, algo que marcaba que un error o desatención se iba a pagar muy caro para cualquiera de los dos.
Y allí apareció la mejor jugada colectiva del partido para conseguir el gol de la apertura a los 78'. Cristóforo tiró una pared con Arezo, luego habilitó la corrida de Milans que tiró el centro rastrero hacia atrá donde Kevin Méndez definió de primera para el gritado 1-0.
Cambios en los dos y el golpe, los tricolores arriesgando por el empate y llegó el golpe de gracia a los 89'. Una acción que pasó por Sebastián Rodríguez y terminó en un pase de Saravia, encontró a Ignacio Laquintana en soledad para mandarla a guardar y colocar el 2-0.
El pitazo de Ferreyra selló el triunfo de Peñarol y luego de un intercambio de golpes entre los jugadores, se desató el festejo de los 41 mil hinchas presentes por una victoria que vale la punta del Apertura.